La millonaria donación de Sudáfrica a Cuba seguirá bloqueada, decide un tribunal de Pretoria

El Tribunal Superior de Pretoria decidió posponer el juicio contra el Departamento de Relaciones Internacionales y Cooperación (DIRCO) del Gobierno de Sudáfrica, después que en 2022 la organización civil independiente AfriForum lo demandara por declarar su intención de donar al Gobierno de Cuba 50 millones de rands (poco más de dos millones y medio de dólares).

De acuerdo con el reporte del medio local SA People, que no ofreció detalles sobre las razones del tribunal para tomar esa decisión, la donación sigue paralizada después que la organización demandante obtuviera de la justicia local un interdicto urgente para evitar que la entidad gubernamental entregara la suma.

Posteriormente, el intento de apelación del Gobierno fue desestimado.

Ernst van Zyl, oficial de campaña de Estrategia y Contenido en AfriForum, declaró tras conocer de la posposición del juicio: "Sudáfrica se encuentra actualmente en una crisis de energía, una crisis de desempleo, una crisis de corrupción y una crisis de crecimiento económico. No hay justificación para una donación de 50 millones de rands a Cuba".

"Si los camaradas del ANC (Congreso Nacional Africano, por sus siglas en inglés) están tan desesperados por donar millones a sus amigos en el Gobierno cubano, pueden financiar este gasto ellos mismos con la ayuda de los salarios excesivos de más de 2,4 millones de rands por año que ganan los ministros", apuntó.

Tras el bloqueo del donativo, en agosto de 2022 Naledi Pandor, ministra de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica, estalló: "AfriForum no puede decirnos a quién apoyar".

La funcionaria de Pretoria dijo al Parlamento que la coalición de derechos civiles, que llevó a los tribunales sudafricanos el donativo invocando la situación de pobreza que padecen millones de sudafricanos y consiguió que un juez paralizara su entrega en marzo, está "interfiriendo con las obligaciones ejecutivas del Gobierno".

En respuesta a interrogantes que le realizara el Consejo Nacional de las Provincias en el legislativo, Pandor afirmó: "Creemos que es derecho del Gobierno hacer y ejecutar las relaciones internacionales. No puede ser AfriForum el que nos diga con quién debe interactuar el Gobierno sobre la base de la actividad humanitaria o cualquier otra área de actividad de las relaciones internacionales".

DIRCO había intentado dar por resuelto el conflicto solicitando el acceso directo a la Corte Constitucional para apelar la orden y, al mismo tiempo, a la Corte Suprema de Apelaciones. Pero esta rechazó esa petición.

"Continuamos nuestra interacción con Cuba. Tenemos un caso en este momento con AfriForum, que dice que no podemos proporcionar la ayuda humanitaria que Cuba había solicitado a Sudáfrica", dijo Pandor.

"Nos dirigimos a la Corte Constitucional con este asunto porque creemos que esto es una interferencia con las obligaciones ejecutivas que nos otorga la Constitución", afirmó.

Asimismo, para subrayar la urgencia de su Gobierno, aseguró que Cuba enfrenta escasez crónica de alimentos, combustible, medicinas y electricidad.

Después que se hiciera público el conflicto y numerosos medios y voces de la sociedad civil sudafricana cuestionaran al Gobierno por "regalar" dinero a La Habana, el presidente, Cyril Ramaphosa, aseguró que el donativo serían artículos de salud y alimentos, no dinero.

Pandor afirmó también que se han tomado medidas para fortalecer las relaciones con Cuba. "[Este es un país] con el que tenemos lazos de amistad muy fuertes y sólidos. En 2012 firmamos un acuerdo de asistencia económica que desbloqueó un paquete de 350 millones de rands", señaló.

"Disfrutamos de un superávit comercial con Cuba hasta 2021 que se puede atribuir a ese acuerdo anterior. El acuerdo ha hecho una contribución significativa al aumento de las exportaciones sudafricanas a Cuba. A través del paquete se crearon empleos y benefició a industrias de inversión clave", comentó.

Pretoria y La Habana tienen estrechas relaciones en los ámbitos político y económico, y también militar. Decenas de técnicos cubanos integran en el país africano el Proyecto Thusano, por el que reparan vehículos militares, mientras que soldados y oficiales sudafricanos estudian en las academias de las distintas armas en la Isla. Este acuerdo supone ingresos millonarios para las Fuerzas Armadas de Cuba.