El Hospital Clínico Quirúrgico Hermanos Ameijeiras recibe un donativo de EEUU

El Hospital Clínico Quirúrgico Hermanos Ameijeiras de La Habana recibió una donación del Roswell Park Comprenhensive Cancer Center, de EEUU, según informó el sitio web del Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP). 

De acuerdo con la publicación, el donativo consiste en un broncoscopio y sus accesorios. El MINSAP dijo que esta acción sucede en "el ámbito de la colaboración con los hospitales cubanos en temas referidos al tratamiento del cáncer y la conducción de ensayos clínicos".

La nota explica que "el broncoscopio será empleado en el país como parte de los ensayos clínicos con la vacuna cubana contra el cáncer del pulmón CIMAVax-EGF, luego de que varios médicos del Roswell Park ofrezcan durante esta semana un entrenamiento sobre su uso".

"Los médicos estadounidenses realizarán reuniones técnicas en los hospitales Hermanos Ameijeiras y el Centro Nacional de Cirugía de Mínimo Acceso, con los especialistas y las direcciones de estos centros", agregó la información oficial.

El Roswell Park Comprehensive Cancer Center, ubicado en Nueva York y fundado en 1898, fue el primero en los Estados Unidos en centrarse específicamente en la investigación del cáncer.

Pese a las constantes quejas de La Habana por el embargo, en 2022, las exportaciones de productos sanitarios desde EEUU registraron el valor más alto desde 2003, cuando se hicieron públicos los informes de compras de material de esa naturaleza por vez primera. No obstante, se desconoce cómo son usados y adónde fueron destinados tales productos.

Igualmente, las donaciones humanitarias el año pasado ascendieron a 30.083.306 dólares, casi el triple si se comparan con los 11.074.090 de 2021.

La Habana solo revela a conveniencia el contenido tales donativos y su destino. Por lo general, los medios oficiales solo se refieren a los donativos que organizaciones procastristas transportan desde EEUU, y ocultan la existencia de otros embarques mientras acusan a Washington de todas las penurias que sufren los cubanos.

Todas las exportaciones están autorizadas en virtud de la Ley de Reforma de Sanciones Comerciales y Mejora de Exportaciones (TSREEA, por sus siglas en inglés) de 2000, aprobada por la Administración de George W. Bush, a la que La Habana recurre sin pausa desde entonces.