El Centro de Estudios Internacionales de la Pontificia Universidad Católica de Chile (CEIUC) incluyó a Cuba entre los cuatro regímenes autoritarios que existen en América Latina, para abordar el retroceso democrático en la región dentro de su informe Riesgo Político América Latina 2023, publicado este mes.
El informe menciona a Cuba en su capítulo dedicado al "deterioro de la democracia, junto con el avance del populismo y el auge autoritario, ante las crisis institucionales y de gobernabilidad" y alerta sobre el riesgo del "recrudecimiento de la represión" en la Isla.
"La democracia a nivel global está bajo asedio. La mitad enfrenta un serio proceso de deterioro mientras los autoritarismos aumentan tanto en número como en su nivel de represión. Consecuencia de ello, dos tercios de la población mundial vive ahora en democracias en retroceso o en regímenes híbridos y autoritarios", señala el documento.
"América Latina no escapa a esta recesión democrática. La situación se ha venido deteriorando progresivamente desde 2007 a la fecha" y ejemplifica añadiendo que "actualmente existen cuatro regímenes autoritarios: Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití (este último convertido en un estado fallido)".
"En el otro extremo se ubica Uruguay, la democracia de mejor calidad de la región según todos los informes (V-Dem, The Economist, IDEA Internacional, Freedom House). Entre ambas categorías encontramos un conjunto de países calificados como democracias imperfectas o bien como regímenes híbridos (dejaron de ser democracias, pero no son aún regímenes autoritarios plenos)", añaden los autores del informe Jorge Sahd K, Daniel Zovatto y Diego Rojas.
"Todo parece indicar que las perspectivas para 2023 seguirán siendo mayoritariamente negativas. En Cuba y Nicaragua no se observa voluntad para iniciar una transición a la democracia. Vemos, por el contrario, un recrudecimiento de la represión", señalan.
El informe coloca a Cuba en el puesto 142 en el ranking global de democracia y solo superada por Venezuela en la región en el índice de 2021 para Latinoamérica y el Caribe.
Según el informe, "América Latina se encamina en el 2023 a otro año complejo y retador".
El reporte revela, además, "la creciente percepción de inseguridad frente a un crimen organizado cada vez más extendido; polarización y propuestas autoritarias; riesgos de nuevos estallidos de malestar social ante una economía anémica y gobiernos incapaces de procesar de manera oportuna y eficaz las demandas ciudadanas; una crisis migratoria que no cede; y la aparición de temas como la inseguridad alimentaria, el aumento de ataques cibernéticos o la pérdida de competitividad para desarrollar la 'economía verde'".
El centro de estudios internacional de la universidad católica chilena, lamenta que todo esto ocurra, además, "en una región que sufre de un 'eclipse diplomático' que le resta visibilidad y protagonismo en el escenario global".
El informe "configura un cuadro regional donde la gobernabilidad será crecientemente compleja, convirtiéndose junto con la inflación, la inseguridad y la incertidumbre en los mayores retos que deberán enfrentar un número importante de países latinoamericanos".
Riesgo Político América Latina 2023 anticipa que los "'tiempos nublados' continuarán en la región, pero acompañados de nuevas oportunidades de crecimiento, en especial en agricultura, minería, energía y nearshoring, que deben ser aprovechadas".
"En este escenario de alta inestabilidad, volatilidad y riesgo político, los gobiernos y empresas deberán seguir mejorando su capacidad de navegar en aguas agitadas, manejar incertidumbre y expectativas, implementar reformas que respondan a las demandas ciudadanas con responsabilidad fiscal y sin afectar el clima de inversión y, sobre todo, ofrecer resultados", concluye.