El Gobierno admitió que la pesca en Cuba no va a recuperarse en el futuro cercano y que la recién aprobada Ley de Pesca no se redactó con el objetivo de que haya más pescado, pese a las constantes quejas por la falta del producto en la dieta en un país rodeado por el mar.
"No quiero romperle las ilusiones a ninguno, pero la pesca en Cuba no va a recuperarse a los niveles que experimentamos hace más de tres décadas", dijo al portal oficial Cubadebate Ariel Padrón Valdés, director de Regulaciones Pesqueras y Ciencias del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL).
"Tenemos el fatalismo geográfico de habitar el Caribe, donde existen aguas ricas en biodiversidad, pero pobres en nutrientes, por ello, dependemos de los pocos escurrimientos que llegan al mar desde la tierra", justificó.
"En los continentes existen grandes cantidades de peces porque tienen caudalosos ríos que arrastran muchísimos nutrientes al mar, ese traslado de los nutrientes desata la cadena alimenticia y la abundancia de recursos marinos", agregó.
El sitio estatal hizo referencia a los frecuentes cuestionamientos de los cubanos sobre "¿cómo es posible que vivamos en una isla rodeada de mar, y sea tan difícil comer pescado? ¿Por qué, si hubo un importante desarrollo de la acuicultura en los finales de los 80, no se ven siquiera peces de agua dulce?".
Sobre la Ley de Pesca vigente desde agosto de 2020, sin impacto en la mesa del cubano, Padrón Valdés declaró que el texto no se elaboró pensando en el objetivo de que haya más pescado y alegó que "el tema tiene muchas más aristas".
Según las declaraciones del funcionario, además del reconocimiento legal del pescador comercial no estatal en su calidad de trabajador por cuenta propia, la norma legal se aprobó para "incrementar las acciones de prevención y enfrentamiento a los delitos e ilegalidades asociados al régimen de pesca", o sea para un mayor control de los recursos.
Padrón Valdés lamentó que, por obsolescencia de las embarcaciones y por otras razones ajenas al país, "la pesca en aguas internacionales ha desaparecido".
"Dentro de la plataforma cubana, de las 70.000 (embarcaciones), hoy contamos con alrededor de 20.000 repartidas en: 12.000 de peces, 4.000 de langostas, 600 de camarón, 800 de túnidos y un poco de otros productos que se obtienen de la plataforma como esponjas, pepinos de mar, ostión y cobo. Además, se cultivan como promedio otras 20.000 toneladas de peces en agua dulce. Así vemos, cuando se sacan cuentas, la reducción del consumo per cápita bajó de 16 kg a unos 3,8 kg", dijo.
Para el funcionario, "es la acuicultura la que tiene que desempeñar el mayor papel si queremos que haya más pescado en Cuba".
"No voy a decir fechas para no equivocarme, pero existe un programa acuícola que de consolidarse dará resultados. Estamos hablando de 10.000 toneladas de la plataforma, pescado marino, y el resto 77.000 de la acuicultura", anunció.
"Para el 2022, se debe romper el récord de producción y siembra de alevines en el país; se han preparado las empresas para aprovechar eficientemente los desperdicios de las industrias cárnicas y pesqueras, que mezclados con subproductos agrícolas, constituyen una fuente de alimentos alternativos para atenuar el déficit de piensos balanceados de importación", agregó.
Mientras los cubanos se tienen que conformar con clarias, tilapias y croquetas de pescado, productos como la langosta, el camarón y la anguila se exportan y llegan hasta países lejanos como China.
En septiembre de 2020, Manuel Santiago Sobrino Martínez, ministro de la Industria Alimentaria, dijo que productos como estos son exportados para garantizar el dinero para la compra de los escasos alimentos que el Gobierno vende a través de la libreta de racionamiento y el consumo social.
"Si nos damos el gusto de comer langosta y camarones faltará la leche de los niños", señaló en declaraciones en el espacio de la "Mesa Redonda" que levantaron la irritación de los cubanos.
Un año después, tampoco hay apenas leche a disposición de los cubanos.
La codiciada langosta cubana se exporta a diversos países, incluidos Canadá y España. Está además presente en contados restaurantes estatales y privados y en algunos hoteles de la Isla, con precios en dólares, así como en la mesa de los dirigentes cubanos.
Pues yo he visto reportajes de otras islas caribeñas y en los mercados se ven pescados a vender y no digamos ya la cantidad de frutas y verduras que hay, debe ser que los habitantes de esas otras islas no tienen el voraz apetito de los cubanos.
La República Dominicana; en el Caribe se come pescado.
Una pregunta: Y el vaso de leche que prometió Raul?
Al paso que vamos el único nutriente para el pueblo será el aire que se respira.
Lo que sobra son argumentos para justificar la falta de todo para el pueblo, pero no para los mandamases y familia ni para los turistas. Al pueblo que le den por el c•••.