La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y sus Relatorías Especiales para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (REDESCA), y Libertad de Expresión (RELE) han condenado la represión estatal y el uso de la fuerza durante las protestas en Cuba e instado al diálogo sobre los reclamos ciudadanos.
En un comunicado, la CIDH afirma que el Estado cubano debe "garantizar integralmente el derecho a la protesta", y llama al "respeto de los estándares internacionales de derechos humanos sobre el uso de la fuerza estatal y de debida diligencia para la investigación de los hechos denunciados; así como a entablar un diálogo al interior de la sociedad para atender las demandas de la población, y a cesar su distanciamiento de los sistemas internacionales de derechos humanos".
El pasado domingo 11 de julio, miles de cubanos salieron a las calles, en al menos 40 ciudades y localidades del país para protestar pacíficamente al grito de "Libertad"
Las manifestaciones también clamaban la liberación de los activistas, periodistas y artistas que habrían sido detenidos por expresar su opinión en contra del Gobierno cubano.
Ante la protesta popular, el Gobierno decidió usar la fuerza contra el pueblo y culpó a los EEUU de la organización de estas manifestaciones. Hasta el momento se ha registrado un fallecido y más de 150 personas están en paradero desconocido como consecuencia de su participación en las protestas.
La CIDH considera inadmisibles y temerarias las declaraciones oficiales que califican como enemigas a las personas manifestantes. Estas declaraciones estigmatizan la protesta, generan un clima de permisividad a la violencia, pueden alentar el enfrentamiento entre la ciudadanía, y son incompatibles con los estándares internacionales para garantizar el derecho a la protesta.
En este contexto, la RELE recibió reportes sobre ataques a periodistas independientes y corresponsales. De acuerdo con la información disponible, Ramón Espinosa, fotorreportero para la agencia AP Noticias, habría sido agredido por agentes de la policía cuando cubría la manifestación en La Habana; también un camarógrafo de la misma agencia habría sido agredido presuntamente por un grupo de ciudadanos afines al Gobierno. Asimismo, la RELE recibió información sobre al menos diez detenciones de periodistas de medios como Cubanet, Tremenda Nota, Palenque Visión, ADN Cuba y La Hora de Cuba, tanto en La Habana como en otras ciudades; y de operativos policiales que habrían impedido a varios reporteros salir de sus casas.
Además, La Comisión y su RELE recibieron reportes sobre alteraciones en el servicio de internet en el contexto de las protestas, que incluirían bloqueos a aplicaciones móviles de mensajería instantánea y a plataformas de redes sociales, cortes intermitentes al servicio de internet móvil, y un descenso del tráfico de internet hacia y desde Cuba de acuerdo con el informe de IODA (Internet Outage detection and analysis), que incluso habría caído a 0 el domingo 11 de julio.
En este contexto, la CIDH y sus Relatorías llaman al Estado a reconocer, proteger y garantizar los derechos a la reunión pacífica y libertad de expresión, sin discriminación por razones de opinión política; además, reiteran la importancia de que la actuación de los agentes de seguridad del Estado se presente en estricto apego a los estándares internacionales de derechos humanos, los cuales establecen que el uso de la fuerza debe regirse bajo los principios de legalidad, excepcionalidad, proporcionalidad y absoluta necesidad. Adicionalmente, instan a las autoridades a investigar con debida diligencia todos los actos que resulten en violaciones a derechos humanos, a identificar y sancionar a los responsables.
La CIDH y sus Relatorías Especiales recuerdan que la represión directa o la detención arbitraria de manifestantes son incompatibles con el derecho a la protesta. También pide al Gobierno cubano que cese su distanciamiento y habitual ausencia con respecto a los sistemas internacionales de derechos humanos que están abiertos al diálogo y a la asistencia técnica para la garantía de los derechos humanos en la Isla.
Asimismo, reiteran que los periodistas, camarógrafas, fotorreporteras y comunicadoras que cubren las manifestaciones cumplen una función crucial al recabar y difundir información de lo que sucede en manifestaciones sociales.
La CIDH y sus Relatorías enfatizan que, en la actualidad, internet constituye una herramienta fundamental para la plena realización y el goce de los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, como destaca el informe sobre Protesta y Derechos Humanos.
De igual forma, a juicio de REDESCA, aunque Cuba cuenta con vacunas contra el Covid-19 en las etapas finales de su desarrollo, la inmunización de la población aún tiene bajas tasas, lo que habría provocado un aumento de contagios y hospitalizaciones.
En el Informe sobre la situación de los derechos humanos en Cuba (2020), la CIDH y la REDESCA expresaron su preocupación por las denuncias sobre violaciones a los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales, por causas relacionadas con las políticas nacionales.