El juicio pendiente por los presuntos delitos de tráfico de droga y juegos prohibidos a Panter Rodríguez Baró, Yoel Prieto Tamayo y Jorge Ernesto Pérez García, miembros del grupo Clandestinos, se celebró el martes en el Tribunal Provincial de La Habana, y quedó visto para sentencia, informó a DIARIO DE CUBA Esther Baró Carrillo, madre de Rodríguez Baró.
En la vista oral todos los acusados negaron estar implicados en el delito de tráfico de drogas y solo Prieto Tamayo aceptó estar implicado en el delito de juegos prohibidos. Rodríguez Baró no prestó declaración durante la sesión.
La Fiscalía solicitó para Rodríguez Baró por ambos delitos una pena de 12 años, para Prieto Tamayo siete años y para Pérez García, a quien solo implica en el tráfico de drogas, cinco años.
Aunque por ley está establecido un término de diez días para comunicarle el veredicto a las partes, en el sistema judicial esta comunicación se demora a discreción del Tribunal.
"Yo expresé que esa condena para mi hijo es muy injusta porque él jamás ha traficado droga alguna, ni se le ocupó ninguna droga. Así lo hice saber en el juicio. Expresé además mi inconformidad con que siga en el destacamento 47 del Combinado del Este, donde está junto a otros presos considerados de alta peligrosidad", declaró Baró Carrillo.
En declaraciones anteriores a DIARIO DE CUBA, la madre de Pérez García dijo que su hijo "ni siquiera es consumidor de drogas y mucho menos traficante".
"Lo que están haciendo con él es una gran injusticia", añadió en esa ocasión la madre de este acusado.
Panter Rodríguez Baró y Yoel Prieto Tamayo cumplen condenas de 15 y nueve años de prisión por haber derramado sangre de cerdo sobre algunos bustos de José Martí y vallas con propaganda política en los primeros días de 2020. La sentencia se hizo firme tras un juicio celebrado en diciembre pasado por los presuntos delitos de daños a bienes del patrimonio cultural y difamación de los héroes y mártires de carácter continuado. En ese mismo proceso Jorge Ernesto Pérez García recibió una sanción de un año de privación de libertad.
Organizaciones dedicadas a monitorear y denunciar la situación de los derechos humanos en la Isla como Cuban Prisioners Defenders han incluido a los miembros de Clandestinos en la lista de los más de 100 presos políticos que hay en las cárceles de Cuba.