El diputado al Parlamento Europeo Javier Nart envió una carta a Daniel Quintero Calle, alcalde de la ciudad colombiana de Medellín, para advertirle que contratar una brigada médica cubana para enfrentar el Covid-19 en esa urbe implicaría hacerse cómplice de la violación de los derechos humanos de esos profesionales.
"La salud de su población no puede basarse en la violación de los derechos humanos", puntualizó Nart en la misiva, en la que recordó que el informe de Naciones Unidas del 6 de noviembre de 2019 condenó a La Habana por esclavitud, trata de personas y trabajo forzado.
En un informe realizado por varios relatores de ese organismo multilateral, estos alertaron que las llamadas "misiones de internacionalización" podrían constituir un delito de lesa humanidad y una forma contemporánea de esclavitud.
"El Código Penal de Cuba (artículo 135) fija penas de hasta ocho años de prisión contra los médicos y enfermeros de estas misiones si deciden abandonar el trabajo o no volver a Cuba, impidiéndoseles la reagrupación familiar", apuntó Nart en la carta a Quintero Calle.
"Se les retienen los contratos, se les confisca más del 75% de los ingresos, lo que 'no les permite vivir dignamente', se les hace trabajar más de '64 horas semanales' (160% del máximo autorizado por la OIT), tienen restringida y vigilada la libertad de movimiento y el derecho a la privacidad o las comunicaciones con personas nacionales o extranjeras".
"Además, los profesionales de la salud cubanos reportaron recibir amenazas regulares por parte de funcionarios estatales de Cuba en los países de destino y las mujeres médicas sufren acoso sexual, entre muchas otras violaciones que las Naciones Unidas emitieron como justificadas", fundamenta la carta.
"También existe la infame Resolución 168, del Ministerio de Comercio Exterior de Cuba (MINCEX), que completa el marco represivo", subrayó Nart.
El vicepresidente de la delegación para las relaciones con los países de América Latina y el Caribe en el Parlamento Europeo y descrito como uno de los más ilustres pensadores de la izquierda europea, insistió en pedir a Quintero Calle reconsiderar "la eventual contratación de estas brigadas médicas cubanas", que el funcionario pidió en 2020 y que generó en ese momento fuertes críticas.
En recientes intervenciones públicas, el alcalde de Medellín ha insistido en contratar profesionales extranjeros para reforzar el enfrentamiento a la pandemia.
"Hemos llegado a 900 UCI activas sin acudir a médicos extranjeros. Nuestro personal de salud está doblado", escribió Quintero Calle en su perfil de Twitter el pasado 16 de enero.
Nart fue acusado por La Habana en abril de 2020 de pretender "actuar como lobby anticubano para evitar la llegada" de médicos cubanos a España, luego de que el eurodiputado advirtiera a través de sendas cartas dirigidas al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig; el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez; y al Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, sobre las condiciones en que las autoridades de la Isla organizan tales "misiones médicas".