El Gobierno cubano decidió dar marcha atrás a algunas de las restricciones impuestas a los transportistas privados y unificó las licencias en la modalidad libre y de ruta en una denominada "regular", además de mantener la modalidad de alto confort o clásico.
Con ello parece ponerse punto final al "experimento" (según la jerga utilizada por las autoridades) iniciado en octubre de 2018 para "reordenar" la actividad, en el que los propietarios u operadores de medios automotores tipo auto, Jeep, panel y microbús, con capacidad para entre cuatro y 14 pasajeros estaban obligados a optar por tres tipos de licencia (libre, en ruta y auto de alto confort o clásico), como únicas formas de mantenerse trabajando en el sector.
De acuerdo con las autoridades, los taxistas privados ya no tendrán que optar entre ofrecer sus servicios en una ruta determinada, o de manera libre. Quienes se acojan a la nueva modalidad podrán acceder al combustible a "precios preferenciales", una de las demandas nunca satisfechas de los choferes, informó el diario oficial Granma.
Las restricciones impuestas a los privados provocaron desde huelgas de brazos caídos de los choferes hasta la entrega de las licencias por parte de muchos, así como un aumento de precios que impactó a la población en un país donde el transporte público no consigue satisfacer las necesidades.
"La modalidad regular es el transporte de pasajeros o de cargas que se hace desde un destino en un tráfico autorizado, cobra ese transporte, teniendo en cuenta el límite de los precios máximos que tengan establecidos los Consejos de la Administración, puede realizar un servicio puerta a puerta (a petición del usuario) y no puede brindar el servicio de alto confort o clásico", explicó Marta Oramas, viceministra primera del Transporte en la Isla.
Con la nueva denominación de la licencia termina la distinción entre "taxis ruteros" y "taxis libres", y a partir del cambio, los precios de combustible en pesos cubanos (CUP) para los transportistas con la licencia de taxi regular quedan fijados en 8,00 pesos (CUP) por litro de diésel regular, y de gasolina motor, denominada b 83. Por su parte, los choferes que utilizan gasolina regular b 90 podrán comprarla a 10,00 pesos (CUP) el litro, y la gasolina especial tipo b 94, a 15,00.
Falta ver si con las escasez actual de combustible en las gasolineras que sufre Cuba, que ha dado lugar a largas colas para abastecerse, la medida tiene el efecto deseado.
De acuerdo con la viceministra, con esa medida se pretende "eliminar totalmente en el país el precio de oferta y demanda en los servicios básicos, que brindan estos porteadores privados."
Los gobiernos municipales y provinciales serán los encargados de regir los precios máximos del servicio de taxi para los transportistas privados.
Según las nuevas disposiciones, que entrarán en vigor el próximo 5 de enero, los trabajadores por cuenta propia que tienen la Licencia de Operación del Transporte en las modalidades que ahora se unifican, podrán hacer el cambio sin costo adicional.
En el caso de las licencias de extensión nacional para la transportación de pasajeros en camiones, camionetas y ómnibus, se exige que los medios de transporte dispongan de ventanillas o climatización, asientos fijos al suelo, iluminación suficiente y un sistema de aviso entre el salón y la cabina del chofer.
Las personas naturales no tienen que ser necesariamente propietarios de un vehículo para solicitar la licencia. De acuerdo con las normas, se pueden brindar esos servicios utilizando un medio de transporte propiedad de su cónyuge, o de un familiar con el que tenga hasta el segundo grado de consanguinidad (padres, hijos, hermanos, nietos, abuelos), o primer grado de afinidad (suegros, nueras y yernos).
Quien solicite la licencia en esa situación, tiene que demostrar el grado de consanguinidad con el propietario y su autorización.
Según datos oficiales, hasta septiembre estaban registrados como trabajadores privados 617.974 personas, la mayor parte (160.206) asociados al transporte y la elaboración y venta de alimentos.
El trabajo privado en Cuba sigue limitado a actividades no profesionales y padece restricciones que, entre otras cuestiones, se circunscriben a la falta de un mercado mayorista.
El servcio de Ferrys entre la Habana y Miami comenzara a partir del proximo mes de Enero/2020.
Solución: ¡QUE EL PUEBLO CUBANO SE DECIDA A MANDARLOS AL CARAJO! Si hay que sufrir, QUE SEA DE UNA VEZ Y POR TODAS.
En este tema siguen descolocadas las autoridades cubanas. Esto les sucede puesto que lo único que persiguen es vigilar atentamente las entradas monetarias de los choferes, y no resolver el tema de la transportación. Así les va y así les irá mientras no liberen por completo ese mercado.
Como ha afirmado con rotundidad pasmante un chico esta semana a uno de los "youtubers" famosos: "contra la competencia en Cuba no se lucha: la competencia simplemente se elimina y ya está". Consanguinidad bajo prueba y afinidad con acta de matrimonio por delante, para que a nadie se le ocurra adquirir tres o cuatro carros y ponerlos a trabajar con cualquiera. Esto, solo para eliminar la posibilidad de acumulación de riqueza y, al propio tiempo, proteger el monopolio estatal. En fin, descolocados por completo. Mientras tanto la gente de a pie seguirá sufriendo las consecuencias.