El Estado reabrió el restaurante-bar Yang Tsé, en el Vedado, y el Fruticuba (sodería) de 58 y 41, en Playa, hechos que vincula a las celebraciones por los 500 años de La Habana el próximo 2019 y por el 1 de enero, aunque la población se ha mostrado escéptica de que los servicios con calidad se sostengan en el tiempo.
Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido en La Habana, y Reynaldo García Zapata, presidente del gobierno en la capital, asistieron a la reinauguración de los establecimientos gastronómicos y pidieron a sus trabajadores "esmerarse en la calidad de la atención al pueblo, de las ofertas, y en el cuidado y mantenimiento de la instalación", publicó el sitio oficial Cubadebate.
El Yang Tsé abrirá al público todos los días desde las 12:00 del mediodía hasta las 10:45PM. Está ubicado en la céntrica intersección de 23 y 26 y especializado en comida china con variados menús en pesos cubanos, y a precios asequibles, dijo Pedro Busquet Famadas, director general de la Empresa Restaurantes de La Habana.
La Unidad llevaba cerrada cerca de seis años. Con la apertura se ofrecen 17 platos elaborados a partir de pescado, mariscos, pollo y carne de cerdo.
En la reparación participaron también la Industria Cubana del Mueble e Inoxidable Varona, con el mobiliario y equipos de cocina, dijo a la ACN Antonio Reyes, su administrador.
Torres Iríbar exhortó al colectivo a competir con los mejores restaurantes del habanero Barrio Chino, pero varios lectores de Cubadebate ponen en duda la capacidad de gestión del Estado para estas actividades.
"Lamento que el Estado insista en la gestión directa de restaurantes, cafeterías, bares y parecidos cuando la repetida experiencia dice que no se sostienen, que son fuente de desvío de recursos, corrupción y mal trato", escribió Julio Suárez.
"La inversión que se hace periódicamente para revivir estos servicios se hace con nuestro dinero, con dinero de todos. Supongo que la intención es ofrecer productos a precios mejores que en el sector privado y es buena, pero la terca práctica dice que no funciona por lo que al final, nuevamente desperdiciamos los escasos fondos que generamos los cubanos", opinó.
En su opinión es "mejor entregar esta esfera a la pequeña y mediana empresa privada y preservar la gestión estatal a áreas estratégicas como la energía y sociales como salud, educación y seguridad social".
Según señaló el medio oficial, la Sodería de 58 y 41, en Playa, (antiguo Fruticuba) incluye una heladería con variados sabores, una unidad al aire libre para la venta de jugos y batidos de frutas, y un parque infantil.
"Ha quedado muy bonito, bien pintado, con aire acondicionado, sus áreas exteriores remozadas, el mobiliario se ve nuevo, el helado que acabamos de probar está exquisito, las bolas son grandes y el precio, barato; solo falta que todo esto se mantenga", dijeron a la ACN un grupo de adolescentes que inauguraron la instalación.
La sodería tiene capacidad para 40 comensales, cuenta con una mini planta para producir diariamente 400 litros de helado, y a partir de la gestión de su administración y de la Empresa Provincial de Recreatur y Turismo, a la que pertenece, se supone que no deba tener problemas con el suministro estable de frutas, de acuerdo con funcionarios citados.
Raúl Macías, vicepresidente del Órgano de la Administración en Playa, declaró a la ACN que el rescate del céntrico y populoso establecimiento era una demanda de la comunidad.
Otro lector de Cubadebate se preguntó "por qué insisten que todo debe ser administrado por el Estado cuando la práctica demuestra que no da resultado".
"Deben darle más participación a la pequeña empresa privada", recomendó.
Otro usuario identificado como Erik contó que la pizzería Buona Sera (de 23 e I) "hace año y pico se remozó y se gastó bastante amueblándola y (hoy) en día es una fonda de mala muerte, donde muchos mendigos y pordioseros van a comer".
"La calidad de la comida es horriblemente pésima. Spaguettis salconchados con salsa Carmelita y las pizzas de sabe Dios qué. Y mientras se deteriora a diario, notas el contrabando de mercancía por la parte lateral trasera", criticó.
Para Luis L y otros lectores, está claro que "la gastronomía estatal NO FUNCIONA" y se pregunta cuándo se darán cuenta.
Ni las Cooperativas no Agropecuarias (CNA) en el sector de la gastronomía, un experimento del Gobierno cubano para impulsar el deteriorado sector, han funcionado. Actualmente una docena de estas se encuentran en proceso de extinción "por mal funcionamiento y litigios entre sus socios".