Ahora que son 'eficaces', ¿se pondrán los gobernantes cubanos las vacunas que celebran?

Miguel Díaz-Canel, su Gobierno y los voceros oficiales han celebrado como un éxito los resultados de "eficacia" alcanzada en los ensayos clínicos de los candidatos vacunales contra el Covid-19 Soberana 02, del 62%, y Abdala, del 92%. Mientras, los cubanos se preguntan si después de tales anuncios los funcionarios del Estado se inocularán tales fármacos.

"Hace 13 meses pedí a nuestros científicos una respuesta soberana contra la Covid-19. No dieron una, sino cinco respuestas. Dos ya son vacunas y vamos por más", celebró el gobernante en su perfil de Twitter.

No obstante, una duda asalta a muchos observadores: ¿por qué no se ha visto ni a Díaz-Canel ni a otros funcionarios ponerse los inyectables producidos en la Isla?

Estrechos aliados de La Habana, como Vladimir Putin y Nicolás Maduro, se mostraron en público en el momento de ponerse la vacuna, al igual que presidentes aliados como Andrés Manuel López Obrador, en México, y Alberto Fernández, de Argentina, o Joe Biden, quien se puso la vacuna de Pfizer en diciembre de 2020 para promover que los ciudadanos se inmunizaran contra el nuevo coronavirus.

Sin embargo, hasta la fecha ninguno de los dirigentes cubanos ha divulgado si está inmunizado ni qué vacuna se ha puesto. En cambio, todos se han sumado a la propaganda a favor de los candidatos desarrollados en la Isla.

Los resultados preliminares de la tercera y última etapa de pruebas de Soberana 02 y Abdala se dieron a conocer entre el sábado y el lunes, desatando la euforia en Cuba, cuyo Gobierno lo ha apostado todo a sus propias vacunas y rechazó entrar en el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS) o comprar alguno de los inyectables en el mercado internacional.

La OMS establece que para que un candidato vacunal sea considerado vacuna debe demostrar una eficacia igual o mayor al 50%.

Soberana 02, del Instituto Finlay de Vacunas (IFV), mostró un 62% de eficacia con un esquema de dos dosis en un ensayo con 44.010 voluntarios, en tanto Abdala, del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), se probó con una muestra de 48.000 personas en un esquema de tres dosis y alcanzó una eficacia del 92,2%, según datos divulgados por esas instituciones.

Las entidades responsables han anunciado que solicitarán en breve la autorización de uso de emergencia al organismo regulador en Cuba, el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED). Una vez obtenida la luz verde, comenzaría el proceso para lograr la validación internacional de las dos vacunas.

Sin embargo, ambas fórmulas ya están siendo administradas a cientos de miles de cubanos en lo que el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) califica como "estudios de intervención sanitaria" que corren en paralelo a los ensayos clínicos.

Los anuncios ocurren mientras las cifras de contagios marcan récords, con 1.561 nuevos casos el lunes y otros 1.489 el martes en la Isla. Los confirmados activos con el virus ascienden a 8.662 y los fallecidos rozan los 1.200.

Por ello, varios internautas cuestionaron a Díaz-Canel su mensaje en Twitter: "¿Por qué no pides una respuesta para la escasez de medicinas, antibióticos, vitaminas, aspirinas, medicina para la sarna?", le comentó Armando, haciendo referencia a la escasez grave de medicamentos básicos que sufren los cubanos.

"No hay libertad de expresión, de prensa, de pensamiento, no hay comida, ni agua, ni dinero, ni medicinas, en fin, no hay democracia y tenemos que obedecer a un único partido político de más de 60 años, pero tenemos vacuna...", ironizó Albert Soler.

El usuario readyforbattle detalló: "Si Abdala es 92% positiva ¿por qué seguir gastando en las otras cuatro? ¿Cuándo van a publicar los datos? ¿Qué agencia independiente va a validar los datos? Llevan más de un millón de vacunados según ustedes, ¿por qué siguen subiendo los casos?"

"Por Dios, cuanta politiquería y asco. No has ni mencionado el nombre de los científicos. Has gastado cifras millonarias, el país desestabilizado completamente para cumplir con su ego comunista de tener una supuesta vacuna. Todo se basa en dar una imagen falsa ante el mundo", cuestionó Benjamín.