La violencia generada por las bandas criminales en Haití no ha tenido receso ni siquiera en los días de Navidad, con grupos armados que dan muestra de su poder de fuego incluso en medio de un estado de emergencia que está vigente durante un mes. Este 24 de diciembre el conteo de víctimas sumó a dos periodistas y un policía.
El Gobierno provisional del primer ministro Alix Didier Fils-Aimé decretó un estado de emergencia en todo el territorio haitiano entre el 22 de diciembre de 2024 y el 21 de enero de 2025. Tal disposición no amedrentó a las bandas criminales que operan principalmente en Puerto Príncipe, y este martes los habitantes de la capital, en medio de las fiestas navideñas, vivieron otra jornada de violencia.
En un ataque que se atribuyó el grupo encabezado por el exoficial de policía Jimmy "Barbecue" Chérizier, fueron asesinados dos periodistas y un policía. Otras personas resultaron heridas. Todas las víctimas participaban de la reapertura del principal hospital público de Puerto Príncipe, el hospital HUEH (Hospital de la Universidad Estatal de Haití).
Muchos de los asistentes a lo que era un acto oficial, para mostrar la reconstrucción del hospital, se vieron atrapados durante varias horas debido al intenso tiroteo de las bandas armadas en las inmediaciones, de acuerdo con los reportes de medios de prensa haitianos.
Reivindicado lo que calificó de "lucha social" al estilo de Fidel Castro y Ernesto "Che" Guevara, a inicios de este 2024 Barbecue se hizo notorio tras asaltar dos prisiones y dejar en libertad a los presos. Desde entonces su pandilla controla el centro de Puerto Príncipe, la asolada capital haitiana, de donde han huido decenas de miles de personas. En total, unas 700.000 personas se han desplazado forzosamente en el país caribeño a consecuencia de la violencia criminal.
Johnson "Izo" André, antiguo rival de Barbecue y ahora subordinado a este, según reportes de la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional, fue quien dio la orden de atacar el hospital. En un video difundido en redes sociales, André argumentó que los grupos armados con control del territorio donde está ubicado el hospital no habían dado autorización para el acto que tuvo lugar este 24 de diciembre.
De acuerdo con la Iniciativa Global, se calcula que existen unas 200 pandillas en todo Haití, y en la capital, Puerto Príncipe, operan las principales, alrededor de dos docenas de estos grupos criminales. Según reportes de la ONU, el 80% del territorio de la capital haitiana está bajo control de estas pandillas, sin que la presencia —reducida aún— de una fuerza internacional armada encabezada por Kenia haya podido hacer mella en el poder de fuego de los criminales.
Durante los últimos años, especialmente desde el asesinato del entonces presidente Jovenel Moïse, en julio de 2021, las bandas criminales se hicieron más independientes financieramente y más poderosas en términos de armamento. Secuestros, tráfico de drogas y armas, extorsión a los habitantes, son algunos de los mecanismos de financiamiento del crimen en Haití.
"Las pandillas de hoy en día gozan de mucho mayor grado de capacidad militar que las de hace una década", indica un reporte de la Iniciativa Global. "Esto se ha visto impulsado en buena medida por la capacidad de las pandillas para adquirir armas de grueso calibre".
Los ataques de las pandillas tienen al sistema de salud de Haití al borde del colapso, con saqueos, incendios y destrucción de instituciones médicas y farmacias en la capital. La violencia mantiene un aumento de pacientes y una grave escasez de recursos para tratarlos, según un reporte de France24.
Una semana antes del ataque contra el principal hospital, hombres armados asaltaron y causaron daños parciales en el hospital Bernard Mevs, en Puerto Príncipe, informó la agencia de noticias Reuters. Ataques de este tipo, que en ocasiones están dirigidos contra miembros de bandas rivales que están heridos o recibiendo atención sanitaria, llevaron a Médicos Sin Fronteras a suspender sus operaciones en Haití el mes pasado, al no tener garantías mínimas de seguridad.
En este con texto, Naciones Unidas actualizó la cifra de muertos tras una masacre en la que decenas de ancianos y líderes religiosos fueron asesinados por una pandilla, y pidió a las autoridades que lleven a los perpetradores ante la justicia.
Un informe reciente de la ONU confirmó que entre el 6 y el 11 de diciembre más de 207 personas fueron asesinadas a balazos y machetazos por la banda criminal Wharf Jeremie, una de las principales del país, que las acusó de utilizar brujería contra el hijo de Monel "Mikano" Felix, su cabecilla.
Monel "Mikano" Félix comparte el liderazgo criminal con el exagente de policía Barbecue Chérizier. Según estimaciones de la ONU, la organización criminal de Félix cuenta con aproximadamente 300 miembros y ha extendido su dominio a varias zonas de Puerto Príncipe.
Hechos como esta masacre de adultos mayores y el ataque a hospitales aumentan el escepticismo de los ciudadanos en torno a la eficacia de la misión multinacional de seguridad que encabeza Kenia, en medio de falta de compromiso de países donantes y la negativa de China y Rusia, en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, de aprobar una misión permanente de paz de la propia ONU.
La violencia en Haití, durante este año de diversos acontecimientos protagonizados por las bandas criminales, deja un saldo de 5.000 fallecidos.
El despliegue de tropas extranjeras en Haití ha resultado insuficiente hasta ahora. Solo han sido enviados 400 efectivos desde Kenia, lejos del mínimo de 2.000 necesario para que la misión internacional aprobada el año pasado pueda responder de manera efectiva. Esta misión tiene por objetivo ayudar a reconstruir a una debilitada Policía Nacional de Haití y, al mismo tiempo ,está autorizada para hacer frente en el terreno a la violencia criminal.
Celebrando el fin de año a base de machetazos. Bella diversidad cultural.
Los grandes problemas requieren de grandes soluciones:
Una operación de inteligencia combinada, con otra Militar dirigida a desarticular el grupo de cabecillas que dirige esa agrupación de pandillas. Y poner bajo control y arresto a todos estos terroristas, eso es una forma de terrorismo local.pero requiere preparación y no el culipandeo que tienen con esta pandilla hatiana .ningun Gobierno del mundo quiere echarse encima esa responsabilidad.