El Gobernador de Texas, el republicano Gregg Abbot, aprobó un proyecto de ley para arrestar y expulsar a inmigrantes que hayan ingresado de manera ilegal a ese estado de Estados Unidos, informó CNN en español.
El proyecto, conocido como SB4, permite a las autoridades locales arrestar a los inmigrantes y otorga a los jueces la capacidad de emitir órdenes de expulsión a México. La ley debe entrar en vigor en marzo.
El control en las fronteras ha agudizado las diferencias entre el Partido Demócrata y el Partido Republicano, que condicionó el envío de un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania a una reforma de la política migratoria por parte del Gobierno de Joe Biden.
El domingo, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) anunció la suspensión temporal las operaciones en los puentes ferroviarios internacionales en Eagle Pass y El Paso, Texas, a partir del lunes, debido a un aumento en los cruces fronterizos de migrantes.
El jefe de la Patrulla Fronteriza de EEUU, Jason Owens, informó a CNN que las autoridades fronterizas detuvieron a unos 192.000 inmigrantes en los puertos de entrada en noviembre. La cifra representa un incremento del 2% en comparación con las 188.000 detenciones de inmigrantes en octubre.
Los miembros demócratas de la Cámara de Representantes han advertido que el proyecto de ley sobrepasa los poderes del Gobierno federal. La Casa Blanca llamó a impulsar un proceso judicial contra Abbot por invasión de competencias, ya que la política migratoria y fronteriza depende de Washington.
Los legisladores demócratas consideran que la ley puede tener como consecuencia un incremento de la discriminación racial. También han alertado sobre el efecto disuasorio que podría tener sobre inmigrantes que hayan sido víctimas de delitos a la hora de acudir a comisaría a denunciar por el miedo a ser detenidos.
Una vez detenidos por la policía, los detenidos tendrían dos opciones: o aceptar una orden judicial de expulsión, o ser procesados por delitos de entrada ilegal en el país.
Los inmigrantes que entren ilegalmente a Estados Unidos pueden afrontar penas de cárcel de hasta 20 años o multas de hasta 2.000 dólares.
Abbott, partidario de la política migratoria del expresidente Donald Trump, se ha pronunciado en varias ocasiones a favor del muro que el exmandatario republicano quería levantar en la frontera de EEUU con México.
Antes de aprobar el proyecto de ley que permitirá el arresto y la expulsión de los inmigrantes ilegales, Abbot había trasladado a miles de inmigrantes a ciudades estadounidenses gobernadas por demócratas.
También llegó a instalar defensas de alambre de púas y boyas gigantes en el río Bravo, que marca la frontera entre Texas y México.