Zelensky llega a EEUU después de negociar apoyos inéditos en América Latina

Luego de buscar el respaldo de los países de América Latina, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, llegó a Washington con la necesidad imperiosa de lograr que el Gobierno norteamericano libere nuevos fondos para las Fuerzas Armadas ucranianas, congelados en el limbo por una disputa política en el Congreso.

Zelensky se reunirá con Joe Biden en la Casa Blanca y con legisladores en el Capitolio, en un último esfuerzo por conseguir una multimillonaria asistencia, crítica para sostener la ofensiva contra el Ejército de Vladimir Putin.

"Putin debe perder", dijo Zelensky en un discurso en la Universidad de Defensa Nacional, en Washington. "Pueden contar con Ucrania y esperamos poder contar con ustedes", agregó, citado por EFE.

El viaje de Zelensky a Washington llega luego de una histórica visita a Argentina para la asunción del presidente Javier Milei, devenido en el principal aliado del líder ucraniano en una región donde ha tenido enormes dificultades para tejer alianzas.

"Nos interesa que Argentina juegue un papel importante en la paz desde América Latina, que nos apoye en todos los continentes", pidió Zelensky en Buenos Aires, antes de viajar a Estados Unidos.

A su paso por Buenos Aires, el mandatario ucraniano se reunió con sus pares de Uruguay, Paraguay y Ecuador, y le dio oxígeno a la posibilidad de realizar una cumbre de la paz en América Latina.

Para el presidente de Ucrania, "el apoyo y la fuerte voz unida de los países latinoamericanos que están junto al pueblo de Ucrania en nuestra lucha por la libertad y la democracia son muy importantes para nosotros", escribió en sus redes sociales tras su primer viaje a América Latina desde que comenzó la guerra.

El mandatario precisó que en su encuentro con Noboa ambos discutieron sobre las posibles alianzas estratégicas en materia de inversión y cooperación comercial, además del fortalecimiento a las relaciones diplomáticas.

"Discutimos acerca de las nuevas perspectivas para que Ucrania y Ecuador amplíen la cooperación bilateral, particularmente en las áreas de seguridad, digitalización y comercio agrícola", indicó Zelensky, mientras que la Presidencia de Ecuador señaló que la reunión entre los mandatarios "fortalece sus relaciones diplomáticas, las alianzas estratégicas y la atracción de inversiones".

El presidente de Ucrania dialogó también con Santiago Peña, presidente de Paraguay, y con Luis Lacalle Pou, de Uruguay.

Sobre la reunión con Peña, Zelensky informó: "Contamos con que Paraguay se sume a la implementación de la Fórmula de Paz". Con respecto al encuentro con Lacalle Pou, el mandatario ucraniano señaló: "Agradecí a Uruguay por enviar a su representante a la más reciente reunión de la Fórmula de Paz y expresé mi esperanza de que Uruguay asistiera a la próxima ronda de conversaciones en Suiza".

Zelensky intentó reunirse con Lula durante una breve escala en Brasilia en su ruta a Buenos Aires, pero el Planalto rechazó la propuesta y envió al aeropuerto a la directora del departamento de Europa y EEUU de la Cancillería, Maria Luisa Escorel.

El diario O Globo afirmó que Zelensky había propuesto reunirse con Lula, pero una fuente del Ministerio de Asuntos Exteriores indicó que "este tipo de encuentro en una base aérea es muy raro, sin una preparación previa específica".

El domingo, luego de la toma de posesión, Milei se reunió con Zelensky, en la primera reunión bilateral de su Gobierno, un gesto que ofreció una clara señal respecto de cuál será el posicionamiento de Argentina en la geopolítica global: respaldo a las democracias liberales, y distanciamiento de las autocracias, aunque sin llegar al quiebre de las relaciones, tal como quedó a la vista con China.

El líder ucraniano dijo que está interesado en una cumbre por la paz en América latina y quiere que Milei lo ayude a concretarla.

Zelensky llegó el lunes a Washington apremiado por garantizar que se mantenga el respaldo crítico que le ha brindado Estados Unidos a su defensa.

El Gobierno de Biden envió un nuevo paquete de asistencia militar al Congreso, que incluye apoyo militar para Ucrania, Israel y ayuda humanitaria para la Franja de Gaza. Pero el paquete está trabado en el Congreso porque los republicanos quieren ampliar el financiamiento para reforzar la seguridad en la frontera, una pelea añeja entre la Administración demócrata y la oposición republicana, que amenaza con debilitar la defensa ucraniana ante la invasión de Rusia.

"Creo que las únicas personas que estarían contentas si esta solicitud de presupuesto suplementario no fuera votada y aprobada por el Congreso están sentadas en Moscú, en Teherán, en Pekín. Para Ucrania, esto es absolutamente vital", dijo el domingo el secretario de Estado, Antony Blinken.

"Han logrado avances notables durante el último año para hacer retroceder la agresión rusa, recuperando más del 50% del territorio que fue capturado desde febrero de 2022. Pero ahora están en una batalla feroz en el sur y el este. Nos estamos quedando sin financiación para ellos", advirtió.