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Emigración

Crisis migratoria: Una cubana pide ayuda para repatriar el cuerpo de su hija, víctima de feminicidio en México

Una ONG mexicana presenta una denuncia para que se investigue la muerte de un migrante cubano en Chiapas.

Tapachula
La cubana Yarlenis Ortiz González, víctima de feminicidio en México.
La cubana Yarlenis Ortiz González, víctima de feminicidio en México. Iraida González/Facebook

La camgüeyana Iraida González pidió ayuda en las redes sociales para repatriar el cuerpo de su hija Yarlenis Ortiz González, quien habría sido asesinada por su expareja en México el pasado 30 de noviembre.

González explicó en Facebook que la familia no tiene los recursos económicos necesarios para pagar por el envío a Cuba del cuerpo de su hija, para "darle digna sepultura en el calor de su tierra y sus seres más queridos".

La mujer incluyó en el mensaje dos números de cuenta bancarias para que las personas interesadas en ayudarla puedan transferir dinero en pesos cubanos o en moneda libremente convertible (MLC).

En el primer caso, el dinero debe ser transferido a la cuenta 9238-1299-7470-1270 y en el segundo, a 9235-1299-7894-2709.

De acuerdo con González, a su hija, que tenía 37 años al morir, la sobreviven dos hijos adolescentes de 15 y 17 años.

Según el influencer cubano Niover Licea, quien dio a conocer el caso en su cuenta de Instagram, la repatriación del cuerpo cuesta 7.500 dólares.  

El influencer explicó que en México no se permite la cremación del cuerpo de una persona que ha sido víctima de homicidio.

Según Licea, Ortiz González trabajaba en un restaurante en Tapachula y fue asesinada en su propio centro de trabajo. Algunas personas habrían intentado defenderla, "pero poco se pudo hacer".

"Cuando llegaron las ambulancias, ya no tenía signos vitales", explicó el influencer, quien añadió que el autor del feminicidio fue la expareja de Ortiz González y se encuentra a disposición de las autoridades mexicanas.

El medio independiente cubano 14ymedio identificó al presunto autor del feminicidio como Iván Cabrera Martínez, también de Cuba, con quien Ortiz González había terminado la relación días antes. El feminicida habría empleado un ama blanca para asesinarla.

El Artículo 164 Código Penal del estado mexicano de Chiapas establece que el delito de feminicidio se sanciona con privación de libertad de 40 a 60 años y una sanción económica que debe determinar el juez.

La Fiscalía informó al medio independiente cubano que el caso contra el presunto feminicida permanece abierto y que el acusado tiene un mes para que su defensa presente pruebas a su favor.

También en Tapachula, Chiapas, se produjo la muerte del migrante cubano Luis Enrique Méndez Romero. La ONG Centro de Dignificación Humana (CDH) presentó una denuncia formal ante la Fiscalía para que investigue el hecho, que habría ocurrido mientras Méndez Romero se encontraba bajo la custodia del Instituto Nacional de Migración (INM).

El INM informó en un comunicado que Méndez Romero había solicitado ser enviado a Cuba y que falleció el pasado 16 de noviembre durante el traslado de la estación Siglo XXI al Hospital Cofat. El cubano había manifestado sentirse mal y por eso se le llevaba al centro de salud.

Sin embargo, el director de CDH, Luis García Villagrán, declaró al diario La Jornada que la evidencia muestra que Méndez Romero murió en las instalaciones de la autoridad migratoria.

Según el activista mexicano, existe contradicción en los dictámenes emitidos por el hospital donde fue atendido el cubano y el de la Fiscalía General del Estado.

El director del CDH añadió que hay fotos que muestran al migrante inconsciente —presuntamente sin vida— en el cubículo de la estación Siglo XXI donde se alojaba.

García Villagrán informó que por los hechos también se interpuso una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

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1 comentario

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Es difícil e inmensamente triste para una madre no poder sepultar a su hija cerca de ella, pero los hijos emigran y con ellos la distancia. Si no eres rico tienes que contar con el riesgo de no poder repratriar el cadaver, que es un procedimiento caro y complicado en cualquier país del mundo. Ese es el otro precio que tiene la emigración: morir fuera de tu patria. Para mi sinceramente eso no es ningún problema, como no quiero (como Hatuey) que me entierren en la misma tierra de los gordos de GAESA, ya tengo mi „muerto comprado“ en la tierra de Mozart.