Las cifras más recientes de las agencias especializadas de la ONU sostienen que 7,3 millones de venezolanos han salido del país en los últimos años. Allí se suman migrantes, refugiados o solicitantes de protección internacional. Colombia, de lejos, es el país con el mayor volumen de personas en este éxodo que pasó a ser masivo a partir de 2015.
Las cifras actualizadas el 11 de junio por la plataforma R4V, que reúne los esfuerzos de la Organización Internacional de Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado de la ONU para Refugiados (ACNUR), muestran que 2,4 millones de venezolanos están en territorio colombiano. Analistas y los propios migrantes sostienen que desde la llegada de Gustavo Petro al poder, hace un año, dio un giro en la política migratoria.
Si bien no ha ocurrido una decisión explicita, una medida pública que deje en evidencia el giro de 180 grados entre el Gobierno de Petro y la política de puertas abiertas que tuvo su antecesor, el conservador Iván Duque (2018-2022), han comenzado a proliferar denuncias en redes sociales y en las afueras de edificios públicos, principalmente en Bogotá, que dejan en evidencia cambios en el sistema, en teoría automatizado, que procesaba —en el pasado— de forma diligente las solicitudes hechas por ciudadanos venezolanos, generalmente en condiciones precarias.
La llegada de Gustavo Petro a la Presidencia de Colombia significó un giro a la política hacia Venezuela con respecto a la Administración de Iván Duque. El dirigente de izquierda, apostó por normalizar la relación con su vecino lo que despertó la incertidumbre sobre cómo afrontaría la migración venezolana.
Bram Ebus, periodista e investigador del International Crisis Group, al ser consultado por DIARIO DE CUBA, confirma el giro que se ha dado con el Gobierno de Petro en Colombia.
"Vemos que el Gobierno de Petro no ha apostado mucho a una política migratoria necesaria para la integración socioeconómica de los venezolanos. Si bien se extendieron los plazos para aplicar por el Estatuto de Protección Temporal vemos una retórica de no reconocer la crisis migratoria ni las causas que llevan al venezolano a buscar un futuro fuera de su país", sostiene Ebus, quien residió en Caracas.
De acuerdo con Daniel Pardo, periodista de la BBC en Bogotá y quien antes estuvo como corresponsal en Caracas, los testimonios de venezolanos en Colombia sin estatus regular se acumulan a diario. A su juicio, son miles los migrantes que durante el último año no han podido renovar su permiso de permanencia y miles más los que, desde que entraron al país, no se han logrado formalizar.
No ocurrió un anuncio oficial, sencillamente el sistema dejó de funcionar de forma ágil y efectiva, comenta a DIARIO DE CUBA un solicitante de protección internacional desde Bogotá. Por razones de seguridad este hombre de 50 años, acompañado de su familia, pide que se mantenga en reserva su nombre.
Al contrario de un proceso que fluía bastante bien en línea, en la actualidad cada día se observan, según medios de prensa, colas de venezolanos en las puertas de la Dirección de Migración en la capital colombiana. En su mayoría afligidos o preocupados por la falta de respuesta oficial a sus trámites en línea.
En un principio el Gobierno de Juan Manuel Santos, pero principalmente la Administración de Duque, fijó protocolos, empoderó entidades oficiales y recursos legales para que los migrantes venezolanas formalizaran su estatus para poder trabajar, recibir educación y salud. Duque además exhibió siempre un discurso solidario y comprensivo con el éxodo venezolano, al tiempo que fustigaba duramente al régimen de Nicolás Maduro.
Petro y sus ministros no han sostenido públicamente que van a cambiar las regularizaciones. El propio presidente colombiano sí ha privilegiado una política de acercamiento con Maduro y en algún momento sostuvo que promovería los retornos voluntarios de venezolanos a su país, cosa que no ha ocurrido.
Ebus, por su parte, sostiene que la migración venezolana en Colombia es una realidad diaria que llegó para quedarse: "Hay que aprovechar la educación, preparación y mano de obra que traen, pero para eso se requieren pasos conjuntos de Gobierno, sociedad civil y empresa privada".
Sin embargo, para el periodista y consultor, ahora el Gobierno colombiano tiene otra actitud hacia la población migrante y muchos venezolanos no han encontrado estabilidad en su segundo hogar. "Acá se le abrieron las puertas al migrante con el Estatuto de Protección Temporal, lo que les permitió tener acceso al mercado laboral, salud y educación para los niños, pero muchos no lograron sostenerse y decidieron irse a EEUU por la selva del Darién", expresa.
A inicios de este mes de julio se difundieron en Bogotá los resultados de una encuesta hecha a más de 6.000 venezolanos en Colombia. El sondeo determinó que la regularización de la situación migratoria de los venezolanos en Colombia todavía tiene amplios rezagos. El 37,4% de los encuestados señaló que no poseía ningún documento, el 56% cuenta con Permiso de Protección Temporal (PPT), y apenas un 4% con Permiso Especial de Permanencia (PEP).
La principal razón por la que los migrantes han llegado a Colombia, según la encuesta, fue por oportunidades laborales. Ese fue el motivo que expresó el 84,4% de los encuestados, principalmente recurrente en los mayores de 25 años. La segunda causa es el acceso a servicios de salud, como lo manifestó un 45% de las personas, principalmente los mayores de 55 años. En su gran mayoría, ocho de cada diez, dijeron que su deseo es permanecer en Colombia.
Dice: "El dirigente de izquierda, apostó por normalizar la relación con su vecino [dificultando la entrada de venezolanos]". Para el gobierno cubano, un gobierno "amigo" facilitaría la entrada de cubanos para que se conviertan en emisores de remesas.