Las cifras contrastan de forma notable. El Gobierno de Nicolás Maduro le ha garantizado vacunas contra el Covid-19 a casi la totalidad del personal sanitario cubano en Venezuela, mientras se ha mostrado poco efectivo en proteger la salud de los médicos venezolanos. Teniendo como telón de fondo un ineficaz programa de inmunización para el conjunto de la población.
"Gracias a un significativo esfuerzo del Gobierno Bolivariano, la totalidad de los más de 21.000 colaboradores cubanos en Venezuela ya son inmunizados contra el Covid-19, mediante el empleo de la vacuna rusa Sputnik V y su homóloga china Sinopharm", reseñó la publicación Cubadebate el 31 de marzo.
En otra parte señala que más del 95% había recibido la primera dosis, y más del 80% había recibido la segunda dosis. La publicación oficialista adelantaba que al concluir este mes de abril estarían cubiertos, con ambas dosis, la totalidad del personal de salud enviado por Cuba a Venezuela.
La otra cara de la moneda la ha ofrecido el sistema de Naciones Unidas. Según el último informe país de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en ingles), en Venezuela han sido vacunados 98.000 trabajadores de la salud, eso equivale a casi un 25% del total de personal sanitario del Estado venezolano.
Solo entre el 29 de marzo y el 4 de abril, durante la Semana Santa, en Venezuela fallecieron 18 trabajadores de la salud, entre médicos y enfermeras principalmente. Esta cifra la proporciona la ONG Médicos Unidos.
El Gobierno de Nicolás Maduro no ha brindado información de ningún tipo. Salvo señalar el número de vacunas que han llegado, no ha dado información sobre la cantidad de inmunizaciones aplicadas, ni detalles de cómo llevará adelante el plan de vacunar a la población.
"Sabemos que si se vacuna al 1% de la población cada día nos llevaría 100 días lograr la inmunidad de rebaño. En este momento Chile y Uruguay se acercan a ese porcentaje. Pero hay otros que no llegan ni al 0,2% y tardarían 500 días para inmunizar. En el caso de Venezuela no se conocen datos de personas vacunadas y al ritmo que va, podríamos estimar que restarían unos tres años para lograr la inmunidad de grupo", explica a DIARIO DE CUBA el médico y experto en políticas públicas de salud, Marino González.
Venezuela tiene, tomando las cifras de la Oficina Panamericana de la Salud (OPS), la letalidad más alta de Sudamérica para galenos y personal sanitario durante el primer año de la pandemia, entre marzo de 2020 y marzo de 2021.
La letalidad del personal sanitario en Venezuela, con los datos de la OPS, es de 7,21 %, frente al 1,03 % de Ecuador y el 0,19 % de Chile, dos de los países con más casos de Covid-19 en Suramérica en el primer año de pandemia.
El Gobierno de Maduro no ha reconocido el fallecimiento masivo de médicos en Venezuela, y las cifras oficiales no suelen registrar el deceso de médicos y enfermeras.
Desde que se comenzaron a recibir vacunas rusas y chinas en Venezuela, a mediados de febrero, en total apenas han arribado 750.000 dosis, según los propios anuncios oficiales.
Esta cifra resulta irrisoria. Se estima que unos 13 millones de venezolanos, mayores de 16 años, deberían ser vacunados. Eso implica que al país deberían llegar 26 millones de dosis.
Pese a este fuerte desbalance, entre lo que ha ingresó y lo que se necesita, Maduro rechazó el arribo de 2,4 millones de dosis del laboratorio AstraZeneca a través de un convenio con la OPS, dado que el financiamiento de tales inmunizaciones serían garantizados por fondos bajo protección de Juan Guaidó, quien sigue siendo reconocido como presidente interino por diversos países e instituciones internacionales.
Junto a eso, anunció que en este mes de abril se aplicarán de forma experimental las inmunizaciones hechas en Cuba, pero que no han cubierto todas las fases para validarlas como vacunas, de Soberana 2 y de Abdala, cada una con 30.000 dosis.
