La Federación Nacional de Ganaderos de Venezuela (FEDENAGA) pidió al Gobierno de Nicolás Maduro permiso para poder importar diésel ante la inminente paralización de los sectores productivos nacionales debido a la escasez de este combustible, reportó el diario Tal Cual Digital.
"Todos los sectores productivos de alimentos solicitamos al Ejecutivo autorización para que podamos traer importado el diésel que se necesita para seguir operando", dijo en una rueda de prensa el jueves Armando Chacín, presidente de FEDENAGA.
Desde hace unas tres semanas se agudizó la escasez de diésel en este país, donde se estima que ocho de cada diez vehículos de carga utiliza este combustible. La crisis no solo afecta al transporte, sino a la propia generación de alimentos, en un país que ya sufre una aguda crisis de alimentación.
Chacín advirtió en recientes declaraciones a DIARIO DE CUBA que la crisis del gasoil, como se le llama popularmente en Venezuela al diésel, "es peor que la que vivimos el año pasado con la gasolina".
"Ante una crisis inminente por el tema del bloqueo del diésel, también pedimos la comprensión internacional debido a que está en peligro el plato del venezolano. Hoy, en esta rueda de prensa, no estamos pidiendo insumos, créditos ni seguridad jurídica, estamos pidiendo diésel y sobre todo ahora que se viene el ciclo de invierno y lo necesitamos los sectores agrícola y pecuario", dijo.
El dirigente gremial indicó que se necesitan importar al menos 25.000 barriles diarios de diésel puntualmente para los sectores de la carne y de la leche.
Dijo que los 25.000 tractores que quedan de los 70.000 que había en 2007 se encuentran parados en las unidades de producción por la escasez del combustible.
"Están parados porque el Gobierno tiene más de tres meses que no despacha combustible a nuestro sector. No tenemos con qué trabajar, difícilmente podremos labrar la tierra con un camión con gasolina. Tenemos nuestra maquinaria para la alimentación del país parada en los patios", lamentó.
"Algunas unidades han dejado de ordeñar, no tienen capacidad de procesar ni de hacer llegar la leche a la industria; y la industria tampoco tiene capacidad de poderla procesar y transportar a centros poblados. Existe un riesgo real de una parálisis. Si no hallamos cómo transportar y procesar los alimentos, nosotros vamos a cesar la actividad. Si no podemos prender nuestros generadores, la crisis será peor", agregó el presidente de FEDENAGA.
El presidente de la Cámara Venezolana de la Industria Láctea (CAVILAC), Roger Figueroa, advirtió que en los próximos días se va a notar en los anaqueles la crisis que están enfrentando los sectores productivos.
El 17 de marzo Conindustria dijo que varios de sus miembros buscan importar diésel desde Colombia para paliar la grave escasez de combustibles que afecta al país.
"Hay productores que han hecho un acuerdo de diésel de Colombia, vía terrestre, y las autoridades ni siquiera les han dado el permiso para traerlo", dijo el presidente del gremio, Adán Celis Michelena.
Para el líder sindical Iván Freites, de la Federación Unitaria de Trabajadores del Petróleo, "lo de los combustibles en Venezuela no es un problema de producción, es estrategia política y de sometimiento al pueblo".
"Pretenden decir que son las sanciones y esto es falso. Hoy se producen 65.000 barriles de gasoil y 50.000 de gasolina. Prioridad Cuba, contrabando y tercero, Venezuela", dijo Freites en su cuenta en Twitter.
De acuerdo con Carlos Valero, diputado de la Asamblea Nacional legítima (2015-2020), la estatal Petróleos de Venezuela produce diariamente 42.000 barriles de diésel, pero unos 16.000 barriles, "casi la mitad", es enviado a Cuba.
Aunque discrepa en las cifras ofrecidas por Valero, otro diputado colaborador de la gestión de Juan Guaidó, Alexis Paparoni, también confirmó que se sigue enviando diésel a Cuba, aun en medio de la dramática situación de escasez de este combustible que se vive en Venezuela.