La Justicia boliviana anuló la orden de detención contra el expresidente Evo Morales por supuestos delitos de terrorismo, una semana después de la elección de su aliado Luis Arce como nuevo presidente, informó el lunes el juez Jorge Quino.
La orden de arresto contra el exmandatario exiliado en Argentina y que desde el sábado permanece en Venezuela fue levantada porque "se vulneraron sus derechos, básicamente el derecho a la defensa, debido a que no se citó debidamente al expresidente", dijo Quino, presidente del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, al canal local Unitel, reportó Reuters.
La Fiscalía General de Bolivia había imputado a Morales el 6 de julio por supuestos delitos de terrorismo y su financiamiento, y solicitó nuevamente su detención preventiva.
Otra orden de arresto por sedición y terrorismo había sido dictada en diciembre contra él, luego de que renunciara a la Presidencia el 10 de noviembre de 2019 en medio de una profunda convulsión social y acusaciones de fraude electoral.
La base de la demanda es un audio en el que supuestamente se oye a Morales instruir a sus seguidores a "cercar ciudades" para impedir el ingreso de alimentos durante las protestas de hace un año. Este era el único proceso en su contra que incluía una orden de detención, pero el expresidente tiene otras querellas, entre ellas una por supuesto fraude electoral.
Asimismo, se le acusa de sostener relaciones íntimas e incluso tener un hijo con una menor de edad.
El exmandatario indígena y su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), han rechazado todos los cargos y afirmado que estos tienen motivaciones políticas.
Morales adelantó el lunes que podría regresar a la nación andina el 11 de noviembre, aunque expresó cautela y dijo que la fecha "está en debate todavía" y "no está decidido".
Según Morales, varias organizaciones bolivianas le han enviado su petición de que vuelva al país. "Las seis federaciones del Trópico de Cochabamba están evaluando nuestro pedido de que vuelva el 11 de noviembre", comentó en entrevista con la agencia de noticias rusa Sputnik.
En la misma línea, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, de la que Morales es afiliado, habría solicitó su vuelta. "Su máximo ejecutivo, el compañero Jacinto Herrera, desea que vuelva lo más pronto posible, pero también el 11", puntualizó.
"Ellos organizarán mi retorno", aseguró Morales.
De regresar a Bolivia el 11 de noviembre, Morales se perdería la toma de posesión del presidente electo del país, Luis Arce, que está prevista para el 8 de ese mes.
"Arce se está jugando su imagen y que la Justicia cambie de opinión tan fácil es una señal nociva para un electorado mayoritario que confía en el presidente electo", dijo el analista político Jorge Dulón a AP.
La presidenta saliente del Senado, Eva Copa, explicó que al acto de asunción de Arce fueron invitados "los expresidentes, incluyendo Morales... Es decisión de ellos si asisten".
// Mal están los países en que un cambio de Presidente lo puede cambiar todo //
Según mi manera de entender la sociedad, ¡el corazón de la democracia tiene que estar en el congreso nacional de representantes! Ese, si es legítimo y formado por representantes capaces, debía poder tener la última palabra sobre cómo se rige y conduce el país.
Van bien hacia el socialismo del siglo XXI con Evo como presidente.
Alla el tonto que se creyo que Evo no volvia a Bolivia. Se jodieron. Ahora les van a meter el comunismo express. A comer cobalto en potaje.
El primer paso hacia la presidencia. De nuevo.