La dolarización parcial y el control de las divisas serán prioridad en 2025 en la política económica del régimen, cuyo Consejo de Ministros determinó que a partir de ahora lo que llamó "proyecciones para corregir distorsiones y reimpulsar la economía" será oficialmente el "Programa de Gobierno".
En la reunión más reciente, reseñada por el diario oficial Granma, el primer ministro, Manuel Marrero Cruz calificó en programa como un "tema transversal, que recoge todas las esencias y políticas de la vida económica y social del país".
Lo aprobado por el Consejo de Ministros presidido por Miguel Díaz-Canel contiene, según el órgano del Partido Comunista, "un minucioso plan de acciones para su implementación, poniendo especial énfasis en el nuevo mecanismo para la gestión, el control y la asignación de las divisas para todos los actores económicos; la implementación del mercado cambiario, y la dolarización parcial de la economía".
Sin embargo, la nota oficial no ofrece detalles del "meticuloso" programa, tampoco arroja luces del cacareado mercado cambiario ni explica cuáles serán los próximos pasos de esa dolarización parcial tan cuestionada entre expertos y la propia población perjudicada.
Marrero Cruz se limitó a decir que esas "proyecciones" son "vitales para avanzar" en el resto del Programa de Gobierno, sobre todo por el impacto que tienen en dos de los objetivos claves: "Incrementar y diversificar los ingresos externos del país" e "incrementar la producción nacional, con énfasis en los alimentos", que en estos momentos sufre una crisis peor que la del "Periodo Especial".
La cara más visible de la "dolarización parcial" de la economía ha sido el anuncio de las autoridades cubanas de que seguirán abriendo tiendas para vender en dólares en efectivo y en tarjeta por toda la Isla. Economistas lo ha calificado como una decisión funesta.
"Si la dolarización parcial está montada para asegurar la 'captación de divisas' para ser 'gestionada, controlada y asignada' por el Estado, como se dijo en la Mesa redonda, es claro que todo va por mal camino", apuntó el economista cubano Mauricio de Miranda.
Según él, un mecanismo de esta naturaleza "solo apunta a que sobreviva un modelo de economía que no solo no asegura el crecimiento y el desarrollo, sino que perpetúa el subdesarrollo y profundiza la pobreza, a costa de que la burocracia conserve su capacidad de 'gestionar, controlar y asignar', o dicho de otra forma, conservar su poder".
El también profesor de la Universidad Javeriana de Cali, en Colombia, señaló que lo anterior apunta a perpetuar el modelo centralizado de la economía, "cuya ineficacia está históricamente demostrada".
"Se equivocan de plano al definir la captación de divisas como el objetivo de la economía nacional. No, ese es el objetivo de ellos, pero no de la economía nacional. El objetivo de la economía nacional de una país —sobre todo si se dice 'socialista', que no lo es la cubana, ni ninguna en el mundo— debería ser el incremento del bienestar de la sociedad. Pero en cualquier caso, para mejorar el bienestar de toda sociedad es imprescindible incrementar la producción de bienes y servicios".
Para el doctor en Ciencias Económicas por la Universidad de La Habana, Pedro Monreal, "la dolarización es una respuesta racional de agentes económicos a incertidumbres económicas y políticas. Las divisas reemplazan funciones básicas del dinero que no cumple bien el peso cubano. Es esencialmente acerca de reemplazar con divisas, no es para 'captar' divisas", precisa.
"La dolarización parcial tiende a dificultar la gestión macroeconómica. Entre otras cosas, limita la efectividad de la política monetaria e incrementa el riesgo de una crisis de liquidez (el Banco Central no puede funcionar como prestamista de última instancia de divisas)".
Monreal coincidió con De Miranda en que funcionar como receptor de dólares llegados del extranjero no resuelve el origen de la grave crisis que sufre Cuba: la incapacidad de su economía para producir riquezas: "Otra tergiversación es la insistencia en 'captar' divisas, cuando lo que es crucial es 'generar' divisas. Son dos cosas distintas. Dolarizar para 'captar' remesas no resuelve un componente básico de la crisis estructural: un modelo fallido de especialización internacional", advierte.
De Miranda alertó que una consecuencia esperable de la decisión del Gobierno será el agravamiento de la inflación que sufren los cubanos, y que afectará tanto a los que tienen dólares como a los que no cuentan con ellos. Estos últimos son la mayoría.
"Lo que realmente significa la dolarización parcial de la economía cubana es la dolarización de una parte importante del consumo de bienes y servicios, pero no de los ingresos de la población. Esto genera una demanda adicional de dólares para operar en el mercado doméstico, que constituye un factor adicional para que el peso cubano se devalúe. Y esto resulta más grave cuando el único mercado de divisas es informal, porque aumentan los factores de riesgo que debilitan aún más la moneda nacional", precisó.
Lo bueno y bonito de esta película es que allá en el infierno tienen bueno economista como lo mencionado en este artículo y piensan lo mismo y quizás otras estrategias mejor que lo mencionado aquí, pero como no tienen ni voz ni mando tienen que aceptar estupideces de un gordo hp que lo que está cuidando es su bolsillo.
Y . Bla, bla bla, Aeh Aeh Aeh la chambelona!!!!