El descalabro de la inversión extranjera en Cuba queda reflejado con su ausencia en el informe de CEPAL sobre el tema

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) publicó recientemente su informe sobre inversión extranjera directa correspondiente a 2024 y, por mucho que el régimen cubano exponga las supuestas facilidades para este tipo de inversiones en la Isla, el informe proporciona datos para todos los países de la región, excepto Cuba. En tal sentido, el economista Pedro Monreal acotó en su perfil de X que "la palabra Cuba no aparece en el informe".

Monreal agregó que la absoluta ausencia de mención a Cuba en dicho "contrasta con el relato oficial cubano que presenta el país como una ventajosa plaza de inversión en América Latina. Ante la falta de evidencia, ese relato se queda en la propaganda".

La CEPAL destacó que "el informe La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe en su edición 2024 se presenta en un momento sumamente desafiante, ya que América Latina y el Caribe se encuentra en una crisis del desarrollo que se expresa en tres grandes trampas: una trampa de baja capacidad para crecer, caracterizada por un crecimiento económico bajo, volátil, excluyente y no sostenible; una trampa de alta desigualdad, con baja movilidad y cohesión social; y una trampa de baja capacidad institucional y de gobernanza poco efectiva.

La organización internacional subrayó que "analizar las dinámicas de la inversión extranjera directa en la región, y cómo estas se vinculan con las políticas de desarrollo productivo es clave para diseñar políticas que permitan aprovechar del mejor modo posible el potencial que tienen las inversiones de empresas transnacionales para apoyar a que los países y sus territorios enfrenten la trampa de bajo crecimiento". Que Cuba no aparezca en un informe así, cuando los dirigentes del régimen han repetido más de una vez palabras similares a estas, es altamente significativo, y demuestra el gran fracaso de las políticas cubanas para generar inversiones extranjeras.

La región del Caribe recibió un 28% de inversiones más que en 2022 y estas se dispararon en países cercanos a Cuba como Guyana, con un 64% de inversión extranjera directa, y República Dominicana con un 7%.

La CEPAL indicó, además que los principales inversionistas en la región siguen siendo EEUU y la Unión Europea, aunque con una desaceleración en el caso de los primeros, destacaron los expertos de la organización.

"Como conclusión general, salvo excepciones, la inversión extranjera directa continúa concentrándose en sectores y países que ofrecen recursos naturales y mano de obra relativamente barata. Esto refuerza las ventajas comparativas existentes, sin que ello sea, sin embargo, un resultado inevitable. Más bien, representa una invitación a que las políticas de desarrollo productivo potencien y transformen esas ventajas estáticas en ventajas dinámicas”, indicó la CEPAL.

Este informe no es el único documento que hace referencia al descalabro de la inversión extranjera en Cuba, proyectada por el Gobierno como uno de los pilares del largamente postergado desarrollo de la nación. En abril, en la Casa de América de Madrid, fue presentado el XVI Informe de Inversión Española en Iberoamérica. Su director, el economista Juan Carlos Martínez Lázaro, subrayó que Cuba es el país de la región con menor presencia de inversiones españolas y el de peores previsiones para 2024. Solo un 2% de las empresas del país europeo opera en la Isla, frente al 82% de presencia en México, el país con mayores inversiones españolas en América Latina.

La inestabilidad política es vista por un "creciente porcentaje" de compañías españolas como el principal riesgo al que se enfrentan en sus negocios en la región. También preocupa cada vez más la inseguridad ciudadana. En el caso de Cuba, se mencionan como "amenazas o riesgos" las "infraestructuras deficientes".