El Consejo Económico y Comercial EEUU-Cuba, uno de los principales organismos de ese país que promueve los negocios con la Isla, llamó a establecer una lista de MIPYMES "confiables", que despeje las sospechas sobre el uso de los negocios no estatales por el régimen de La Habana como "caballo de Troya" para burlar las sanciones de Washington contra sus empresas.
De acuerdo con un texto publicado por la organización sin fines de lucro, fundada en 1994 y con sede en Nueva York, una lista de esa naturaleza "puede ser útil para brindar confianza y protección a empresas, empresarios, instituciones financieras, fuentes de capital y proveedores de los Estados Unidos" que quieran ajustarse a las determinaciones del Gobierno de EEUU, que prohíbe hacer negocios con firmas vinculadas al régimen de la Isla.
Como recuerda el Consejo Económico y Comercial, en 2017 la Administración de Donald Trump creó la denominada Lista de Restricciones Cubanas (CRL, por sus siglas en inglés), que reúne hasta hoy decenas de empresas, entre ellas negocios del conglomerado empresarial de los militares, GAESA, o vinculadas al Ministerio del Interior (MININT) y el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (MINFAR).
Con esas entidades, que incluyen hoteles, marinas, tiendas y empresas, las transacciones desde EEUU están prohibidas. Pero, recuerda la nota, "en algunos casos, las transacciones indirectas y las transacciones subsidiarias siguieron estando autorizadas".
Por ello, aclara el Consejo, con la autorización por La Habana de la creación de las pequeñas y medianas empresas no estatales, si bien existen MIPYMES creadas "por parte de ciudadanos de la República de Cuba, el Gobierno también ha iniciado una estrategia agresiva para convertir las empresas operadas por él en MIPYME".
Uno de los resultados de esta estrategia, denunciada por numerosos analistas como parte de la venta al mundo de una falsa apertura económica del régimen, "ha sido una confusión en cuanto a la identidad, la procedencia y la política de definir una MIPYME legítima frente a una MIPYME caballo de Troya". La segunda categoría, admite la nota, es de "creciente preocupación para los miembros del Congreso de los Estados Unidos".
"Las empresas operadas por el Gobierno de Cuba que se transforman en MIPYMES a menudo tienen una conectividad inherente, es decir, heredada, con los mecanismos oficiales. Estas mipymes a menudo tienen un acceso desigual al apoyo comercial, económico, financiero y político que sigue sin estar disponible para otras mipymes", reconoce el Consejo.
Ante ese panorama, que la propaganda de La Habana ha tratado de maquillar al defender la legitimidad de este pujante "sector privado", reconoce el Consejo que aparece "un problema de riesgo moral. ¿Deberían las empresas, los empresarios, las instituciones financieras y las fuentes de capital con sede en los Estados Unidos evitar algunas mipymes y abrazar a otras?"
Como mecanismo resolutivo de esas sospechas, la entidad pro negocios sugiere el mecanismo de la Red de Ejecución de Delitos Financieros (FINCEN, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, que requiere que ciertos tipos de entidades sujetas a la jurisdicción de los Estados Unidos presenten un informe de beneficiarios finales, en el que transparenten la verdadera propiedad de una empresa.
Por ello, recomienda el Consejo la elaboración de una lista bajo esos requisitos que pueda "desempeñar un papel fundamental para ayudar a las personas sujetas a la jurisdicción de los Estados Unidos a no involucrarse de manera desaconsejada, inapropiada o ilegal con una MIPYME".
"La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) y el Departamento de Estado de los Estados Unidos crearían una lista de verificación de la información que proporcionaría una MIPYME, que sería la evidencia utilizada para determinar si debe incluirse en la lista. (...) El dato más crítico sería la certificación de que la MIPYME no tiene conectividad (que deberá definirse) con el MININT, el MINFAR o la Lista Nacional de Designaciones Especiales (SDN)".
Y, para ocuparse de ello, el Consejo propone a la Embajada de los Estados Unidos en La Habana, que sería "el punto natural de recolección y mantenimiento de datos, ya que el personal es el más cercano a quienes poseen y administran las MIPYMES".
Para ejemplificar, sugiere la nota: "Por ejemplo, si una MIPYME tiene diez empleados y uno de ellos tiene un historial laboral manchado (empleado por el MININT, el MINFAR...), ¿resultaría eso en la descalificación de la MIPYME de la lista y cualquier compromiso con personas sujetas a la jurisdicción de los Estados Unidos?"
Para el politólogo Dimas Castellanos, columnista de DIARIO DE CUBA, "si bien las MIPYMES constituyen un paso de avance respecto al estado anterior, resultan insuficientes para la formación de una clase media nacional, independiente y para el despegue de las fuerzas productivas, porque nacieron atadas a la Constitución de 2019, concebida como una camisa de fuerza para las futuras empresas privadas".
Según él, "el Partido-Estado-Gobierno, que elaboró la Constitución, decidió que la planificación y no el libre mercado seguirá siendo el rasgo distintivo de la economía. Las MIPYMES no pueden salvar lo insalvable; necesitan de la economía de mercado, de libertades y de un marco jurídico que estimule su creación".
En medio de ese panorama, se yerguen y enriquecen un grupo de MIPYMES que "casualmente" tienen un vínculo con el régimen o sus secuaces.
La economista Rafaela Cruz ha dicho sobre las reformas que dieron pie a la creación de las MIPYMES: "Tras 64 años de absolutismo y miseria no hay cambio alguno de fundamento en la mentalidad del Gobierno cubano. Todas las reformas que han hecho hasta hoy son tardías e incompletas, porque en el fondo son contrarias a su ideología e intereses, por ello están diseñadas de modo que funcionen tan a favor del Gobierno como sea posible, sembrándoles siempre, con dialéctica, propaganda y leyes, el germen de su erradicación cuando las condiciones lo permitan. Ya el igualitarismo dejó de ser útil para un neocastrismo, que entiende que su salvación está en evolucionar, sí, pero no a la democracia, sino a métodos dictatoriales más eficientes".
¿De dónde sacaron estos expertos que hay caballos de Troya y MIPYMES legítimas? ¿Qué diferenciación es esa? El régimen cubano permite o cancela todo lo que entiende conveniente para sus negocios.
Estos asalariados y nostálgicos que sueñan con el socialismo en EEUU no entienden que hay cosas que no se pueden separar. Por ejemplo, la droga del narcotraficante y del drogadicto.
Así que este engendro totalitario disfrazado de emprendimiento, no es más que un frankestein al servicio del cartel de Punto Cero para buscar billete del imperio.
Vamos, pónganse serios:
Mipymes legitimas = 0
Caballos de Troya = Todas
Están tratando con una dictadura.
No sé como van a detectar el vínculo o no de las mipymes con el gobierno o sus secuaces. Que van a ser capaces de investigar, cuando la lista de esbirros y cómplices de la dictadura que entran a diario a este país crece por día y aún denunciados hasta por sus propias victimas, inmigración no toma ninguna acción? Esta es la historia de quien le pone el cascabel al gato.