Las autoridades bancarias cubanas limitarán al sector privado la extracción de efectivo en los cajeros automáticos. Con esa medida pretenden acabar con el desabastecimiento de billetes y el mal funcionamiento de los equipos, ante los cuales se forman frecuentes largas colas, según publicó el periódico Escambray.
Ladys Mora García, subdirectora del área contable en la Dirección Provincial del Banco de Crédito y Comercio (BANDEC), dijo al medio estatal que el sistema tiene "algunas dificultades con el efectivo".
"En su desabastecimiento también nos está golpeando la extracción de volúmenes altos por segmentos particulares como mipymes, trabajadores por cuenta propia, fundamentalmente", dijo.
"Nos informaron que a nivel de país se van a hacer, próximamente, algunas restricciones para limitar la extracción de tan altos volúmenes por estos segmentos particulares en los cajeros. Así les puede durar un poco más la disponibilidad de efectivo. Tenemos que tratar que permanezcan habilitados el mayor tiempo posible, que el dinero nos llegue en tiempo, sobre todo los billetes de altas denominaciones", añadió.
Las declaraciones de Mora García tienen lugar a raíz de las reiteradas quejas de la población por los constantes problemas en los cajeros automáticos, una situación que no es particular de la provincia de Sancti Spíritus, sino de todo el país.
"Siempre es lo mismo para sacar el dinero de los cajeros: o te encuentras una cola inmensa, o no tienen dinero o están sin servicio, sabrá Dios por qué. Antes venías por la tardecita o en la noche que era más fácil hacer cualquier operación, pero ya a esa hora muchas veces tampoco funcionan. Cada vez son más las personas con tarjetas magnéticas y más las dificultades para cobrar", comentó a Escambray Esther Lidia Gómez, mientras esperaba en una larga fila frente al Banco del bulevar espirituano.
"Es cierto que en oportunidades los cajeros automáticos no funcionan, pero en nuestra provincia nunca, ni siquiera en los peores momentos de la pandemia, los hemos tenido sin funcionar por falta de efectivo. A veces han faltado los billetes de altas denominaciones, pero nunca hemos tenido un cajero sin dinero", dijo María Efigenia Caballero, subdirectora del Banco Popular de Ahorro (BPA) en Sancti Spíritus.
"Los niveles de extracción que hoy se producen por la inflación son muy altos para las denominaciones que entregan los cajeros y eso provoca que tengamos que reaprovisionar muchas veces. Eso no es tan complicado en horario laborable, pero cuando se produce los fines de semana los compañeros tienen que venir de sus casas", justificó.
El BPA en esa provincia cuenta con 11 cajeros automáticos, los cuales padecen obsolescencia tecnológica y sobreexplotación. En 2022 promediaron en total más de cuatro millones de operaciones.
Según la funcionaria, se busca "impulsar el uso de las pasarelas de pago que existen, como Bulevar Mi Transfer y EnZona", pero se quejó de que muchos lugares privados no aceptan estos canales de pago, ni los códigos QR.
"Hay miedo al cambio, se avanza lentamente. Algunos no utilizan estas opciones porque tienen temor al control sobre sus finanzas ya que ese dinero iría a su cuenta de operaciones y tendrían que tributar por allí. Pero más temprano que tarde el país se tendrá que ir ordenando. Hoy casi todo se maneja en efectivo y por eso ocurren estos colapsos. La idea no es crecer más en cajeros, sino en las operaciones por los canales de pago. Tendremos que capacitar mucho. Hay que romper el hielo para ese cambio", dijo.
Según los propios datos de la Dirección Provincial del BPA, actualmente muchos clientes ya utilizan estas opciones electrónicas para abonar diversos servicios y realizar transferencias, pero la inmensa mayoría son personas naturales y no las empresas, ni las mipymes, o los cuentapropistas, quienes concentran los mayores volúmenes de dinero para sus transacciones.
Un usuario identificado como El Metro señaló en los comentarios del artículo de Escambray: "Saludos, los negocios tienen poca confianza en las pasarelas por algo sencillo, ustedes juegan con el dinero del pueblo. Y a la hora de ir a solicitar un monto no hay dinero y en caso de que hubiera hay que justificarlo. No es el fisco, ni el miedo, sino las trabas que ponen. Además, claro que hay inconformidad con que los cajeros no sirvan… A esa hora es que necesito el dinero".
La modernización de los servicios de cobros, pagos y transferencias ha provocado el malestar de los usuarios de estos servicios. En Cuba la tecnología choca con los apagones, las deficientes telecomunicaciones y la crisis de escasez generalizada. Además, va ligada al control que ejerce el régimen sobre la ciudadanía.
Con transacciones electrónica de miles de pesos ,de seguro te acusan de maceta o apátrida que recibe billete enemigo.Pero el efectivo es difícil de seguirlo ,los cubanos no son comem...
Cuba es un desastre. A los cubanos los mafiosos le han enseñado a mentir y esquivar responsabilidades.