Activistas cubanos dentro y fuera de la Isla recordaron al preso político Orlando Zapata Tamayo este 23 de febrero, cuando se cumplieron 15 años de que falleciera tras 86 días de una huelga de hambre con la que protestó por la violación de sus derechos en la cárcel.
Zapata Tamayo, nacido en 1967 y albañil de profesión, fue arrestado durante la ola represiva conocida como Primavera Negra, de 2003. Fue acusado de desacato, desorden público y desobediencia civil por el régimen cubano, que lo condenó a 36 años de prisión después de varios procesos judiciales.
El disidente, presentado por la prensa oficial cubana como un delincuente común, inició el ayuno a inicios de diciembre de 2009 para protestar contra los tratos inhumanos que recibía de sus carceleros y exigir mejores condiciones en la cárcel. El aparato de propaganda del régimen intentó desacreditarlo afirmando que buscaba comodidades como un teléfono personal, un televisor y una cocina.
La versión oficial fue desmentida por la disidencia, la madre de Zapata Tamayo y, sobre todo, por la determinación del preso a no ingerir alimentos hasta que sus reclamos fueran atendidos.
Varias organizaciones y opositores cubanos han denunciado durante años la responsabilidad directa del régimen en la muerte del prisionero, al negarle el acceso al agua durante 18 días.
El fallecimiento de Zapata Tamayo generó múltiples reacciones de repudio a las autoridades de Cuba, entre las que aparece una resolución de la Unión Europea, aprobada con 509 votos a favor y 30 en contra, que "condenaba enérgicamente la muerte evitable y cruel", del preso y exigía la "liberación inmediata e incondicional de todos los presos políticos". El texto afirmaba que los disidentes cubanos eran encarcelados "por sus ideales y su actividad política pacífica".
Cuando han transcurrido 15 años desde el deceso de Zapata Tamayo, que forzó a La Habana negociar con España el exilio de sus compañeros en la causa de los 75, procesados y condenados durante la Primavera Negra, los activistas cubanos mantienen viva su memoria y recuerdan su sacrificio.
"Hace 15 años, Orlando Zapata Tamayo murió tras 86 días en una huelga de hambre que sostuvo en una cárcel cubana", recordó este domingo la periodista de DIARIO DE CUBA Luz Escobar en su cuenta de la red social X. "Su sacrificio fue un grito de libertad que la dictadura no ha podido borrar", añadió la reportera exiliada usando la etiqueta #ZapataVive.
El líder opositor José Daniel Ferrer, uno de los 75 opositores y periodistas independientes condenados en 2003, recordó este domingo en su cuenta de X que estaba en la prisión provincial de Las Tunas cuando se enteró de la muerte de Zapata Tamayo y protestó contra el crimen.
"Zapata fue víctima de golpizas, torturas físicas y psicológicas y nunca se rindió. Varios presos comunes que estuvieron cerca de él, me hablaron de su extraordinario valor. Zapata es un ejemplo de coraje y dignidad. Siempre le tengo presente", afirmó el coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), quien, tras ocho años de prisión, recibió una licencia extrapenal que permitía al Gobierno devolverlo a una celda en cualquier momento.
Fue arrestado nuevamente el 11 de julio de 2021, cuando pretendía sumarse a las protestas antigubernamentales que estallaron ese día en decenas de ciudades y comunidades de Cuba.
El pasado 16 de enero, José Daniel Ferrer fue excarcelado como resultado de una negociación entre el régimen y el Vaticano, poco después de que el entonces presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunciara la salida de La Habana de la lista de estados patrocinadores del terrorismo.
El también presidente del Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC) señaló que en los 15 años transcurridos desde la muerte de Zapata Tamayo, muchos presos políticos cubanos han muerto. "Los han dejado morir estando en huelga de hambre, los han matado con enfermedades que pudieron prevenir o curar y los han asesinado a golpes".
"Nuestros mártires nunca pueden ser olvidados", aseveró.
La periodista independiente Yoani Sánchez, directora del medio 14 y medio, recordó que no sabía quién era Zapata Tamayo cuando supo de su deceso. Una opositora a la que llamó el mismo 23 de febrero para conocer más detalles de lo sucedido le contó que el preso político "ya estaba agonizando cuando autorizaron que le dieran atención médica".
En su publicación en X, Sánchez relató su encuentro con la madre de Zapata Tamayo en el Instituto de Medicina Legal, a donde se dirigió con su esposo, el periodista Reinaldo Escobar, intuyendo que la familia del fallecido estaría allí.
"Ha sido un asesinato premeditado", contó que le dijo la mujer.
"El mártir cubano sacrifico su vida exigiendo mejoras carcelarias para todos los presos cubanos sin distinción y el cese de los abusos de los carceleros en las prisiones del régimen comunista cubano", escribió en Facebook este domingo el exprisionero político Ángel Moya, otro de los encarcelados en 2003.
"Hoy 23 de febrero se cumplen 15 años del asesinato del joven humilde, sencillo, honesto, luchador anticomunista Orlando Zapata Tamayo", señaló en la propia red social la opositora Berta Soler, líder de la organización femenina Damas de Blanco y esposa de Moya.
"Zapata, tú estás presente en nuestros corazones", añadió. En otro post, afirmó que "Zapata está presente siempre entre las Damas de Blanco" y que "Zapata vive".
En febrero de 2024, 14 años después de la muerte del prisionero político, la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FDHC) presentó los expedientes de ocho de sus verdugos. Uno de ellos pateó la cabeza de Zapata Tamayo durante una huelga de hambre anterior, según los testimonios obtenidos por la organización.