Ana Ibis Tristá Padilla y Jarold Varona Agüero, dos tuneros que esperaban desde octubre el fallo de un tribunal que pedía una condena de 12 y diez años de cárcel respectivamente por el presunto delito de propaganda contra el orden constitucional, quedaron absueltos este último viernes por el Tribunal Provincial de Santiago de Cuba. DIARIO DE CUBA ha tenido acceso al dictamen.
"Realmente, considero que es increíble. El fallo dice que tanto Jarold como yo somos absueltos por falta de pruebas. Ahora debo tener mucho cuidado porque por cualquier cosa, ellos son capaces de volver a encarcelarme", señala Tristá Padilla, quien estuvo diez meses en prisión provisional y se encontraba en libertad bajo fianza.
En la causa, los jóvenes Félix Daniel Pérez Ruiz, de 22 años, y Christian de Jesús Peña Aguilera, de 21 años, recibieron una condena de cinco y cuatro años de cárcel respectivamente por el delito de propaganda contra el orden constitucional, al convocar en mayo de 2023 a una protesta pacífica en un parque de Las Tunas, suceso que nunca ocurrió.
La condena es un poco menor a la que solicitaba la Fiscalía, que había pedido siete años de cárcel para Pérez Ruiz y cinco para Peña Aguilera. La rebaja de sus condenas permitirá a estos jóvenes acceder a beneficios carcelarios como pasar a régimen de mínima severidad este mes y la libertad condicional el mes próximo.
La Fiscalía consideraba a Ana Ibis Tristá como la principal cabecilla en la convocatoria a la protesta que realizaron estos jóvenes a través de sus redes sociales y también la autora de otras acciones antigubernamentales como la aparición de carteles y grafitis con frases contra el régimen en la ciudad de Las Tunas.
Sin embargo, Tristá Padilla siempre ha dicho que se considera inocente y que nunca realizó estas acciones.
En declaraciones anteriores a DIARIO DE CUBA Tristá Padilla aseguró que en el juicio, celebrado en la prisión El Típico, la parte acusatoria "no mostró prueba alguna y me presentaron prácticamente como una terrorista. Cuando mencionaron que supuestamente yo tenía la intención de poner unos cócteles molotov, el presidente del Tribunal les preguntó qué habían encontrado cuando habían hecho el registro en mi casa". Uno de los oficiales "respondió que no habían hecho ningún registro en mi vivienda, porque no era necesario. El presidente del Tribunal lo cuestionó y le dijo que si él pensaba que yo era un persona tan peligrosa, debía al menos haberlo hecho".
Esta tunera adquirió más visibilidad para el aparato represivo del régimen a partir de que su esposo, Damián de Jesús Hechavarría Labrada, fuera encarcelado en abril de 2021 por denunciar el abuso de varios inspectores estatales. La mujer, de 34 años y madre de una hija, no ha dejado de pedir por las redes sociales la libertad de su esposo, por considerar su encarcelamiento una injusticia.
La persecución de ciudadanos por sus publicaciones en internet ha aumentado desde que el régimen permitió que los cubanos tengan datos móviles en sus celulares. Varios cubanos han pagado multas e incluso recibido penas de cárcel por compartir memes críticos contra el régimen, convocar a marchas pacíficas o simplemente expresar sus opiniones en las redes sociales.
