Con la Isla a oscuras, sumida en un "imprevisto" apagón masivo, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) exigió este viernes que el Gobierno cubano deponga a algunos de sus altos cargos, o estos renuncien, como "responsables de la emergencia humanitaria que vive Cuba", dijo la ONG en una nota de prensa.
"La declaración ayer del estado de 'emergencia electroenergética' es la admisión tácita de un fracaso en la gestión del país, que empeora cada día a marcha forzada" afirmó el OCDH y agregó: "la crisis va mucho más allá de un déficit de electricidad —que mantiene a los cubanos con apagones de casi 20 horas al día—, sino que abarca la falta de alimentos, agua, medicamentos y el aumento de la inseguridad ciudadana".
En junio pasado, un estudio del OCDH sobre derechos sociales demostró que el 89% de los cubanos vive en la extrema pobreza. "Esta situación se agrava cada día, sin que el Gobierno adopte medidas estructurales para sacar al país de la hambruna y la miseria", denunció la organización.
"Simplemente, ha ocurrido lo contrario: se ha acentuado la represión y el acoso fiscal contra los incipientes negocios privados. Por ello, Miguel Díaz-Canel y su Gobierno son responsables directos de la situación y alguien debe renunciar inmediatamente", recalcó el OCDH.
Este jueves, el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, en comparecencia en radio y televisión, exigió más sacrificios a la población, sin ofrecer soluciones. Luego, el régimen ha ordenado el cese de todos los servicios no vitales. De esta forma, para supuestamente paliar la crisis energética, cerrarán todas las escuelas y universidades hasta el lunes, se suspende toda la actividad cultural y se ordenó la movilización de los llamados "Consejos de Defensa", ante las previsibles protestas que emergerán a partir de esta situación y la depauperación sistemática de las condiciones de vida en la sociedad cubana.
Como han manifestado en los propios canales de redes sociales de la estatal Unión Eléctrica, los cubanos están cansados de palabras, lo que demandan es una solución definitiva a los apagones que complican la ya muy difícil sobrevivencia en la Isla.
En tal sentido, el OCDH alertó una vez más sobre "el vertiginoso deterioro económico y social de la Isla, que ha desembocado en la peor crisis de la nación cubana. En la medida en que se agrava la situación, el descontento crece entre los cubanos. La crisis humanitaria puede provocar protestas aún mayores a las de 11 julio de 2021".
Ante esta situación, el Observatorio llamó "a instituciones, gobiernos y organismos internacionales a observar con detenimiento el desarrollo de esta etapa de especial peligro para el pueblo de Cuba. Hay que recordar que en las cárceles cubanas hay casi 1.000 presos políticos, condenados por manifestarse pacíficamente", concluyó el comunicado.
