Luis Miguel Alarcón Martínez y Daniel Álvarez González, los dos jóvenes cubanos que permanecen en prisión tras las protestas ocurridas en Caimanera el pasado 6 de mayo, fueron trasladados este jueves a un destacamento de "sancionados", de la Prisión Provincial de Guantánamo, conocida como El Combinado. Según contó a DIARIO DE CUBA, Victoria Martínez Valdivia, la información se la dio su propio hijo, Alarcón Martínez, en una breve llamada telefónica.
"Ayer él me llamó para decirme que fue trasladado del piso donde él estaba, conocido como 'pendientes', que es donde están los presos que aún no le han realizado juicio, para el otro piso donde están los sancionados, el destacamento 3-C. Allí están los malandros, los delincuentes, no sé cuál es el objetivo de mandarlo para allá", detalló Martínez Valdivia.
Según precisó, a uno de los reos "lo pusieron en cubículo cinco y al otro en el cubículo seis, uno al lado del otro". "Él ha mejorado un poco de salud, pero ahora me dijeron que lo están amenazando para que yo deje de denunciar la injusticia que se comete contra él. Advierto que yo voy a seguir denunciando, el día 9 de noviembre tengo visita y voy a saber si eso de las amenazas contra él es verdad", añadió.
Alarcón Martínez y Álvarez González forman parte del grupo de cinco detenidos durante las mencionadas protestas. Todos fueron arrestados de manera violenta tras iniciar una manifestación pacífica en la que una multitud se congregó en las calles de la ciudad al grito de "¡Libertad!", "¡Patria y Vida!" y "¡Abajo el sistema comunista!".
Estos dos manifestantes son los únicos que se encuentran actualmente en prisión y están acusados de desorden público, a la espera de juicio o de un cambio de medida cautelar.
En septiembre pasado, Martínez Valdivia denunció que ambos prisioneros estuvieron enfermos, sin acceso a medicamentos y atención médica, tras un brote diarreico en el centro penitenciario. El abogado de ambos manifestantes ha solicitado en tres ocasiones un cambio de medida cautelar ―de prisión preventiva a prisión domiciliar― pero la Fiscalía ha rechazado estas solicitudes.
El Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias calificó la protesta en Caimanera como una acción iniciada por personas en estado de embriaguez y negó la represión, pese al material audiovisual que circuló en redes sociales en medio de cortes de internet y de otros servicios de telefonía en toda Cuba. Los videos publicados mostraron la actuación muy violenta de personal militar contra las personas concentradas, incluidas mujeres.
Para amplificar esa versión del régimen, perfiles de Facebook ligados a la Seguridad del Estado como Legionario Cubano y Maximus Romus hicieron responsables de la "organización" de la manifestación a "mercenarios alentados por el odio imperial contra Cuba".