'Si me trae consecuencias, las voy a aceptar': dice la youtuber Hildina sobre las amenazas de expulsión de su centro laboral

La youtuber Hilda Núñez Díaz, más conocida por Hildina, recibió amenazas por parte de los directivos de la Universidad de Oriente, en Santiago de Cuba, de ser expulsada de su puesto de trabajo como profesora debido a los videos que sube a las redes sociales, denunció la propia afectada en su perfil de Facebook.

''Después que hice un vídeo donde mostraba cómo era vivir en un país comunista como Cuba, recibí una llamada un poco extraña de la universidad. La persona me invitaba a una actividad con profesores jóvenes, lo cual me pareció un poco raro porque otros profesores jóvenes no fueron invitados, entonces empecé a sospechar que no era para eso, sino que me llamaban para otra cosa'', contó la youtuber, graduada de Ingeniería Industrial.  

La joven refirió que, después de salir de la reunión, le "llamaron la atención", le dijeron que "si seguía haciendo los vídeos todo iba a llegar a 'otro nivel'".

"Me quisieron meter un poco de miedo. Yo les dejé claro que no estaba haciendo nada malo, que solo estaba mostrando la realidad y si me va a traer consecuencias lo voy a aceptar", añadió.

''Me dijeron que como profesora yo me proyectaba de una manera diferente a lo que proyecta la universidad, que como me podía presentar a dar clases cuando pensaba totalmente diferente'', expresó Núñez Díaz.

''El caso de Hilda Núñez se suma a una larga lista de delitos contra la libertad académica en la Isla, orquestados todos por la Seguridad del Estado, en complicidad con el Ministerio de Educación Superior y los centros docentes'', expresó la ONG Observatorio de Libertad Académica, quien ha documentado cientos de casos de profesionales cubanos expulsados de sus centros de trabajo. 

A finales de noviembre fue expulsado José Luis Tan Estrada de su plaza como profesor de periodismo Hipermedia en la Universidad de Camagüey. Los directivos de ese centro le expresaron abiertamente que tomaban esa decisión por su ''postura política contra el sistema''. 

De igual modo, el dramaturgo Irán Capote fue excluido a finales de noviembre de formar parte del claustro de la Escuela de Teatro de Pinar del Río por presuntos ''problemas ideológicos'', denunció el propio afectado en sus redes sociales.

 La expulsión de centros de trabajo o de estudios por motivos políticos es una práctica habitual del régimen cubano desde sus comienzos. En muchas ocasiones, para justificar la expulsión, los represores se valen de cualquier argucia legal o el más mínimo error de la persona.

Casos como el de los científicos Ariel Ruiz Urquiola y Oscar Casanella Saint-Blancard, la historiadora del arte Yanelys Núñez Leyva y los profesores de Derecho Julio Antonio Fernández Estrada y René Fidel González García, son algunos entre los de decenas de cubanos expulsados de sus centros de trabajo por sus críticas públicas al régimen.