El Gobierno de Estados Unidos expuso en su campaña ¿Presos por qué? la situación de la activista cubana Saily Navarro, procesada por su participación en las protestas del 11J en Perico, Matanzas, así como la del joven Luis Robles, encarcelado hace un año por manifestarse con un cartel en La Habana, y que este jueves será sometido a juicio.
"El régimen cubano busca una sentencia de 11 años para la activista Sayli Navarro, hija del activista detenido Félix Navarro, por intentar unirse a las protestas pacíficas del 11J. Ambos esperan juicio por intentar el simple acto de expresarse", escribió el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols, en un tuit como parte de la campaña ¿Presos por qué?
Sayli Navarro y su padre fueron detenidos el pasado 12 de julio, un día después de su participación en las protestas ciudadanas generadas en decenas de ciudades y pueblos de la Isla. Fueron juntos a la estación policial de Perico para saber de los miembros del Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel que, en distintos municipios de Matanzas, habían sido detenidos el día anterior.
Fueron arrestados de manera violenta en la propia unidad. A ella la inmovilizaron entre varias mujeres agarrándola por el cuello. A su padre se lo llevaron a empujones. La joven fue liberada con medida cautelar y pesa sobre ella una acusación por el supuesto delito de "atentado", contó ella en una entrevista con DIARIO DE CUBA.
Sobre el caso de Luis Robles, Nichols recordó que "enfrenta hasta seis años más de prisión por sostener pacíficamente una pancarta apoyando la liberación de Denis Solís".
"Nos sumamos al llamado del Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria de la ONU para que el Gobierno cubano lo libere inmediatamente", añadió, también un mensaje con la etiqueta de la campaña ¿Presos por qué?
Luis Robles está arrestado desde el 4 de diciembre de 2020 por manifestarse de forma pacífica con un pedazo de cartón en el que podían leerse las frases "Libertad", "No más represión" y "Free (liberen a) Denis", en referencia al rapero Denis Solís, quien fue liberado y emigró a Serbia tras meses de hostigamiento de la policía política.
La Fiscalía pide para Robles una sanción conjunta de seis años de cárcel por los supuestos delitos de "propaganda enemiga y resistencia" . Su juicio estaba programado para 16 de julio pasado en el Tribunal Municipal Popular de Diez de Octubre, pero fue suspendido a raíz de las protestas pacíficas que comenzaron el día 11.
En el video que circuló por las redes sociales puede verse claramente que Robles no se resistió en ningún momento al arresto. También puede verse, y claramente, el apoyo de los cubanos allí presentes.
Este apoyo, sin embargo, no impidió su detención. Robles fue conducido hasta una patrulla. Ningún policía lo empujó, porque él no oponía resistencia. Y esa es la última imagen en libertad de Robles, al montar en un carro patrullero frente al Capitolio de La Habana.
Según análisis de abogados familiarizados con el sistema judicial del régimen, consultados por DIARIO DE CUBA, el proceso penal contra Luis Robles apunta a una estrategia política de disuasión.