En octubre ocurrieron 345 protestas públicas en Cuba, 33 más que en septiembre, informó el lunes el Observatorio Cubano de Conflictos (OCC), organización que refiere "una curva ascendente ininterrumpida" de esa clase de manifestaciones desde septiembre de 2020.
Esa cifra supone un incremento con respeto a septiembre, cuando se reportaron 312, 13 más que en el mes de agosto.
En su informe mensual recién publicado, la entidad señaló que "en medio de la ola más brutal de terror desatada por el Estado comunista desde la guerra civil de los años 60", el pasado mes en la Isla se realizaron 276 protestas en defensa de derechos políticos y civiles, lo que representa el 80% del total.
El Observatorio destacó que por primera vez desde que hace poco más de un año empezaron a confeccionar estos reportes, ese tipo de protestas superaron a las manifestaciones por cuestiones económicas, sociales y culturales, que en octubre sumaron 69 (20%).
La entidad precisó que en meses pasados ambos tipos de protestas suponían cada una el 50% del total.
El Observatorio estimó que la preponderancia en octubre de las protestas políticas y civiles está vinculado a las "injustas condenas a manifestantes pacíficos del 11J", en las que miles de cubanos salieron a las calles a protestar pacíficamente contra el Gobierno, así como a la movilización convocada por la plataforma Archipiélago para una Marcha Cívica por el Cambio en Cuba el 15N.
La entidad advirtió que, ante "la convocatoria cívica del 15N", el Gobierno de Miguel Díaz-Canel "ya perdió" por querer aplicar "una absurda estrategia militar" para contenerla, una estrategia que incluye "un despliegue obsceno de violencia al presentar en las redes sociales a grupos paramilitares armados con palos para reprimir a quienes participen en la marcha".
"Esto ha debilitado aún más su credibilidad, legitimidad, prestigio y capacidad de influencia dentro y fuera de Cuba", agregó en su comunicado el OCC.
La población cubana, a pesar de tales presiones, continua manifestando sus críticas tanto en las calles como en las redes sociales, donde los paramilitares han sido blanco de críticas y hasta de burlas, detalló el Observatorio.
Añadió que el Gobierno tiene miedo a "una nueva situación que no comprenden ni saben cómo controlar", como son unas "organizaciones plurales, horizontales, sin 'cabecillas', con un alto nivel de capacidad comunicacional dentro y fuera de la Isla".
"Son una creativa amalgama de abogados, religiosos, economistas, informáticos, cineastas, dramaturgos, escritores y artistas. Una vanguardia cultural que da voz e incentiva las esperanzas de una creciente masa de ciudadanos empobrecidos e inconformes", agregó.
La organización puso de relieve el proceso suscitado a raíz del 11J, que calificó como "de debilitamiento del poder totalitario y fortalecimiento del poder ciudadano".
El Observatorio Cubano de Conflictos es un proyecto autónomo de la sociedad civil de la Isla apoyado de la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC, por sus siglas en ingles), con sede en Miami.