La artista cubana Yenisleidy Borroto, conocida como Afrik Reina, denunció en sus redes sociales que fue desalojada de la vivienda donde se encuentra alquilada junto a su hijo de tres años, por lo que amenazó con ir a vivir a la sede del Movimiento San Isidro (MSI) con el menor de edad.
Este es el segundo desalojo que sufre la artista, miembro del MSI, en solo 15 días, luego de que los dueños de la vivienda donde residía fueran presionados por agentes de la Seguridad del Estado, según dijo.
"Departamento de Seguridad del Estado cubano, si lo que ustedes quieren es seguirme sacando cada vez que yo me mude de un apartamento a otro, yo sencillamente voy a tener un casero que no me va a sacar a ningún lado. Yo me voy a ir a vivir con Luis Manuel (Otero Alcántara) a San Isidro", afirmó la artista en un video publicado en sus redes sociales.
"Entonces, a partir de ahora, todo lo que ustedes le quieran hacer a Luis Manuel, las obras que le quieran romper, las puertas que le quieran romper, los golpes que le quieran dar, las amenazas de que va a aparecer con la boca llena de hormigas, todo eso, ustedes a partir de ahora se lo van a hacer a mi hijo y a mi junto con Luis Manuel", agregó.
"Yo me voy a vivir ahí y ustedes no me van a sacar de más ningún alquiler", añadió la artista, quien recibió la solidaridad de numerosas personas en las redes sociales, como fue el caso del periodista independiente Héctor Valdés Cocho.
"La Seguridad del Estado usa estos métodos de represión en contra de las personas que pacíficamente le hacen frente. No solo amenazan, hostigan y presionan a periodistas, activistas o artistas, sino también a caseros que están en todo su derecho de rentar en su propiedad a quiénes estimen conveniente", denunció en Facebook Valdés Cocho.
"Afrik sabe que cuenta con un espacio en mi renta, y si nos desalojan, pues nos vamos todos para la sede del MSI en Damas. De dónde nadie nos podrá sacar", finalizó el reportero.
También la artista Camila Lobón se solidarizó con Afrik Reina: "El poder dando lo mejor de sí, haciendo gala de su moralidad paupérrima y crueldad, cuando una artista contestataria y madre soltera, con un niño pequeño, les resulta una amenaza y recurren a la bajeza de desalojarlos una vez más".
Uno de los métodos que utiliza la Seguridad del Estado cada vez con mayor frecuencia para desestabilizar a activistas y periodistas independientes cubanos es hacerlos desalojar por los dueños de las viviendas que alquilan. Este método se aplica fundamentalmente en La Habana y lo sufren sobre todo personas del interior del país.
Al amenazar a los dueños de las viviendas para que desalojen a activistas y periodistas independientes, los agentes de la Seguridad del Estado incurren en un delito de "abuso de autoridad", pues no son estos oficiales los autorizados para determinar las posibles violaciones cometidas en el alquiler, lo que corresponde a los inspectores de las direcciones municipales de la Vivienda, a la PNR o de las oficinas de la Administración Tributaria.
Por otra parte, los agentes de la Seguridad del Estado estarían cometiendo un delito de coacción al compeler al propietario a que haga "lo que no quiera, sea justo o injusto", "o para impedirle hacer lo que la ley no prohíbe", como dispone el artículo 286.1 del Código Penal cubano.
Hijos de puts