Altos funcionarios del Parlamento Europeo (PE) firmaron una declaración condenando el acoso de las autoridades del régimen contra los activistas cubanos que fueron invitados la pasada semana a una reunión con eurodiputados para analizar el cumplimiento del Acuerdo de Cooperación entre la Unión Europea (UE) y Cuba.
Se trata de un grupo de opositores y activistas radicados en la Isla que habían sido invitados a participar de forma virtual en la sesión extraordinaria "La aplicación del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación entre la Unión Europea y Cuba: estado del juego", entre los que se encontraba José Daniel Ferrer, Dagoberto Valdés, Luis Manuel Otero Alcántara, Reinaldo Escobar, Bertha Soler y Manuel Cuesta Morúa.
Del total de representantes de la sociedad civil cubana invitados al evento solo pudo hablar en directo Dagoberto Valdés, pues al resto le cortaron el servicio de internet, por lo que tuvieron que enviar sus intervenciones grabadas.
"Deploramos el hostigamiento por parte de los servicios de seguridad cubanos a los participantes en la reunión, que tuvo lugar el pasado viernes, 11 de diciembre. El día antes del que se suponía que la ganadora del Premio Sajárov, Berta Soler, hablaría en esta reunión remota, fue arrestada arbitrariamente", denuncia el texto firmado por la presidenta de la delegación del Parlamento Europeo para las relaciones con los países de América Central (DCAM) Tilly Metz, el presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores, David McAllister y la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Heidi Hautala.
Los firmantes añadieron que "sorprendentemente todas las conexiones (a internet), excepto una, cayeron justo al comienzo del evento", pues todos los ponentes habían realizado pruebas previas de forma satisfactoria.
El caso del periodista independiente Reinaldo Escobar, que fue detenido por más de cinco horas ese día, en las cuales fue sometido a un interrogatorio, se incluyó de forma explícita en el documento.
Otro de los participantes que denunció acoso ese día fue José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), a quien además de suspenderle el servicio de internet las autoridades cubanas le pusieron vigilancia en la entrada de su residencia.
El texto recuerda que "la Constitución de la República de Cuba, en su artículo 54, establece que el Estado reconoce, respeta y garantiza la libertad de pensamiento, conciencia y expresión".
Los autores del documento pidieron al Gobierno de la Isla que "respete ese derecho constitucional y cesen el acoso continuo a los ciudadanos cubanos, incluidos aquellos que participaron a distancia en la reunión con el DCAM. Esto se extiende al Movimiento San Isidro (MSI), que se dedica a asegurar que la vida cultural en Cuba pueda suceder sin censura".
En la declaración también se indica que tras la reunión del pasado 11 de diciembre "se evaluaron los progresos realizados en la aplicación del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación UE-Cuba (PDCA) que entró provisionalmente en vigor hace tres años".
Los miembros del DCAM afirmaron además que "las acciones antes mencionadas emprendidas por las autoridades cubanas son claramente contrarias al espíritu mismo y a los valores consagrados en el presente Acuerdo".
Los eurodiputados, tan tibios como el parlamento completo "firman declaraciones condenando", pero no tocan la tubería de dinero para Raúl. Ahí dice caca "do not touch" cuidado con el billete para la dictadura.
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