Ayer esto era una estación de metro
donde la gente iba y venía de su trabajo.
Hoy es un bunker
un refugio antitanques.
La mujer enseñaba
el pasado imperfecto en la pizarra.
¿Rusia quiere sentarse a la mesa?
¿Un té negro?
Le dijo a la mujer que se desmilitarice.
Es decir
que se rinda.
Fíjense en ese rostro, Odesa.
Y esa agua oscura, el mar Negro.
Y esa línea que se va corriendo
una cicatriz.
(El cadáver de un niño
huele como la carne
de otro animal descompuesto.)
Fíjense en ese pedacito negro gris.
Si ese pedacito de tierra
es capturado.
Si ese pedacito de tierra echara a correr.
Si corriera el corredor Suwalki.
Damaris Calderón Campos nació en La Habana, en 1967. Entre sus libros de poesía publicados: Las pulsaciones de la derrota (Ediciones LOM, Santiago de Chile, 2013), La soñante (Efory Atocha Ediciones, Madrid, 2014) y Entresijo (Bokeh, Leiden, 2017), ¿Y qué? (Ediciones Las Dos Fridas, Isla Negra, Chile, 2018).