Cayéndose las torres de Manhattan,
empezó
la cuenta regresiva de nuestra libertad.
La caída imparable de la arena
reducía los chances de escapar.
Algunos fuimos sorprendidos
sin saber que debíamos huir.
Pero aquellos que huían desde siempre
ya estaban atrapados cuando el polvo
no había terminado de volar.
Un reloj es una torre que se cae
manteniendo la forma porque fluye
hacia abajo la arena y adquiere
la forma que tenía pero al revés.
Y una torre es un reloj que se derrumba
y pierde la forma para siempre
porque el tiempo que tiene sin medida
es el tiempo brutal de la venganza.
Plano como en el desierto
quedó el paisaje de escombros
y entre sus ruinas humeaban
los gritos y los socorros.
José Ramón Sánchez Leyva nació en Guantánamo, en 1972. Ha publicado los libros de poemas Marabú (La Habana, 2012), El derrumbe (La Habana, 2017) y Talibán (2018). Es editor de la revista La Noria. Este poema pertenece al libro inédito Gitmo.