El cineasta cubano Alejandro Alonso se convirtió en ganador por partida doble el domingo del máximo galardón del festival Vienna Shorts, en Austria, y del Premio del Público en Documenta Madrid. En ambos casos, por su corto La historia se escribe de noche.
De acuerdo con una nota de prensa de la productora del filme, Estudio ST, la película se impuso como Mejor Cortometraje en el certamen austriaco.
"Además de un premio en metálico, las películas premiadas en esta competencia pueden optar a: premios de la Academia (Premios Óscar), Premios del Cine Europeo y Premios BAFTA. ¡Bravo por esta equipa!", celebró la productora.
La historia se escribe de noche se impuso en la 21 edición del Vienna Shorts, donde se exhibieron 306 películas de 67 países. Además de 5.000 euros, el premio incluye como trofeo un árbol recién plantado para que, según los organizadores del festival, el filme "quede arraigado de forma sostenible en Viena", citó la agencia EFE.
En la misma jornada y en la capital de España, Alonso obtuvo el Premio del Público Cineteca Madrid en la Competición Internacional de Documenta Madrid, evento que además califica como el estreno español del corto.
La historia se escribe de noche, con 20 minutos de duración, reza en su sinopsis: "Un gran apagón ha sumergido a Cuba en la oscuridad. En las calles, los habitantes intentan escapar de la penumbra mientras el fuego de las hogueras parece anunciar el fin de una época. Refugiados en el interior de nuestra casa, mi madre me cuenta una visión que desde hace años le atormenta".
Estudio ST apuntó en su nota que "en medio de la oscuridad, que no solo habita en nuestra película, sino que se ha vuelto un hecho persistente y real en nuestra Isla, saber que festivales y audiencias le dan relevancia a una historia tan cercana y espiritual, que es a su vez registro, augurio y esperanza, es un regalo de luz. El cine cubano independiente sigue vivo, trasciende y habita".
Alejandro Alonso explicó en exclusiva para DIARIO DE CUBA que, en lo referido a la posibilidad de optar por una candidatura a los Premios Óscar de la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas de Hollywood, "uno de los requisitos que piden las postulaciones a estos premios es haber ganado en alguno de los festivales que califican. Para los premios europeos solo califican unos 30".
"Luego hay que presentar otra documentación, que en el caso de Cuba sería bastante improbable para ir a algo como el Óscar, porque depende de los institutos de cine", precisó.
Hasta donde se sabe, el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) nunca ha postulado cortos a los premios más prestigiosos del cine en EEUU. Tampoco promueve la obra de los cineastas emigrados. De hecho, al cierre de este reporte, ni siquiera el perfil de Cubacine, medio oficial de la institución, se había hecho eco de los galardones recibidos por La historia se escribe de noche.
Asimismo, según las reglas de la Academia de EEUU, los requisitos para la elegibilidad de los cortos no incluyen su postulación por algún ente nacional.
Alejandro Alonso (Pinar del Río, 1987), egresado de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños (EICTV), tiene una obra como cortometrajista que atesora importantes premios, como el Ammodo Tiger, del prestigioso Festival Internacional de Cine de Rotterdam, Holanda, obtenido por Terranova (2021, codirigido con el cineasta español Alejandro Pérez), la Paloma de Oro en DOK Leipzig, por Abisal (2021). Por este mismo filme, conquistó el Premio Coral al Mejor Cortometraje Documental del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana en 2022.
El cineasta está enfrascado en la fase de desarrollo y producción de su primer largo, La estrella, que verá la luz en fecha próxima.
