Yimit Ramírez es difícil de catalogar. ¿Cineasta? ¿Artista visual? ¿Director creativo? Ramírez es todo a la vez. Se graduó de la Academia de Bellas Artes San Alejandro en 2005, luego del Instituto Superior de Diseño (ISDi) en 2011, y de la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV) en 2018. Hace trabajos en 3D y es uno de los artistas cubanos pioneros en el manejo de la inteligencia artificial.
Yimit es un terremoto. Dice que hay que intentar cien cosas para que a uno le salgan bien tres. No se sabe cuántas cosas está intentando ahora, pero al unísono participa en una exposición en Viena, produce su película Loading y trabaja en su proyecto Bad Pony.
La galería de arte Entre, de Viena, acoge la exposición de artistas cubanos How Long Have You Been Blind, en el marco de la semana de arte contemporáneo de la capital austríaca. El colectivo creativo Forma Foco, junto a Marilyn Volkman, comisaría esta muestra que reconstruye, imagina y representa con herramientas de Inteligencia Artificial, sucesos que parten del 11J. Participan además de Yimit, Camila Lobón, Carlos Quintela, Heiddi Hassan, Kikko Faxas. "Vamos a formar un poco de foco y gusaneo como se merece Viena", dice Ramírez.
"Uno cuando sale de Cuba huyendo de la dictadura, inocentemente cree que va a ser conocido a nivel mundial todo lo que uno está sufriendo, todas las cosas que están pasando en Cuba. Sorprendentemente, hay mucho romanticismo alrededor de la idea de la revolución, del Che, de Fidel, de una pila de gente, que para nosotros son ya claramente horripilantes. Yo creo que si hay algo que puedo hacer desde mi pincha es ayudar a visibilizar eso. A partir del 11J hay mucho material que se puede compartir. Yo lo estoy compartiendo, y a cada lugar donde voy lo explico. Desde el arte podemos ayudar mucho a visibilizar que Cuba no es un jacuzzi en el Caribe, Cuba es una dictadura terrible y manipuladora".
Yimit Ramírez es, en toda regla, un artivista. Su trabajo creativo ha sido siempre muy militante. La primera vez que escuché su nombre fue a raíz de la censura, y todo lo que vino después, de su filme Quiero hacer una película. Ramírez entiende que el 80% de su trabajo lo hace para atacar esa idea ilusa del jacuzzi caribeño.
"Atacar esa idea de algo romántico o de algo que merece la pena seguir existiendo. O esa frase terrible de: 'Quiero ir a Cuba antes que cambie'. Eso es el equivalente racista a 'Yo tengo un amigo negro' u homofóbico de 'Yo tengo un amigo pájaro'".
Loading es el nombre de la película que Yimit tiene en producción. Según el propio artista el producto es un simulacro de cómo son los dirigentes de la dictadura en la vida real. Loading será un híbrido entre material de redes y ficción, sobre cómo ha sido la intimidad de esas personas del 27N para acá. En el universo ficticio de la película se cae la dictadura.
"Es algo que me parece importante, proyectar la caída de esa gente, que esté en película, que esté en el imaginario. Yo creo que eso es en lo que más puede ayudar el arte. El arte cambia mucho menos de lo que uno quisiera. Una película no cambia el mundo, una pincha no cambia el mundo, pero sí cambia una mente y, al final, eso en un plazo un poco más largo ayuda".
Paralelo a Loading, Yimit crea una línea de productos (ropa, tazas, stickers) para "enorgullecer más el universo gusano". Frases nacionalistas como "Soy cubano soy popular", Yimit las convierte en "Soy gusano, soy popular". Yimit nació en San Antonio de los Baños. Quizás de esa ciudad y la innegable tradición de humor gráfico le venga la veta.
"Hay un personaje principal, Bad Pony, que está evidentemente basado en Palmiche. Yo digo que Bad Pony es el Unicornio Azul que se le escapó a Silvio cuando ya se decepcionó y también es el nieto de Palmiche. Una cosa que pasa en Cuba es que tenemos mucho universo común, eso es una desgracia pero luego es usable. Como nos pusieron los mismos canales, súper adoctrinados, y los mismos caseticos de Elpidio Valdés, y los tres muñequitos que hacían ellos y los cuatro que se robaban; todos los cubanos nos sabemos hasta los créditos de Arcoiris musical. Todo el cubano tiene ese dominio. Si tú dices 'Pártelo jabao', todo el mundo sabe lo que es. Entonces he pensado que podemos usar todo eso en su contra y enorgullecernos de ser gusanos".
A la pregunta si se cree en una inminente caída de la dictadura, Yimit responde: "Yo tengo que vivir en la esperanza de que se va a caer, como tengo que vivir en la esperanza de que un mundo mejor es posible; porque si no, me fundo, me deprimo, me caigo y no puedo ni crear. Yo tengo mis días en los que me parece lento y en los que sufro y en los que lloro, pero también tengo otros en los que estoy contento. Y tengo que concentrarme ahí. Por eso mucha de la pincha que estoy haciendo es para proyectar la caída de ellos. Yo creo que con alegría le hacemos más daño que entristeciéndonos y quedándonos opacos sin poder hacer nada".