El trovador oficialista Silvio Rodríguez recibió este viernes el Coral de Honor en la gala de premios del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, informa la estatal Agencia Cubana de Noticias.
"La revolución es lucidez y no autocomplacencia", declaró el músico al recoger el galardón, y deseó que las instituciones culturales cubanas "sean cada vez más sabias e inclusivas" para acercar al país a "la plenitud que solemos soñar".
El cantautor recordó, uno a uno, a todos los integrantes de la Nueva Trova, el movimiento musical fundado hace 50 años por un grupo de artistas identificados con el régimen en ese momento, entre ellos el recién fallecido Pablo Milanés, a quien también el músico mencionó en su recuento.
La figura de Pablo Milanés acaparó por su parte los mayores aplausos en la inauguración del festival de cine de La Habana, cuando se le rindió un homenaje por parte de la organización que compartieron los asistentes, principalmente del mundo de las artes.
La cinta boliviana El gran movimiento se llevó los principales galardones de la noche, entre ellos el de Mejor Largometraje de Ficción y el de Mejor Director, que fue para su director Kiro Ruso.
Entre los reconocimientos estuvo la concesión del nuevo premio Arrecife a la película de producción colombiana y francesa Un varón, del director Fabián Hernández, al considerar el jurado que fue la obra del festival que mejor recogía la realidad de la comunidad LGBTIQ+.
La película Argentina 1985, que se exhibió en la gala de inauguración del festival, obtuvo el de Mejor Dirección Artística, Mejor Guión y Mejor Actuación Masculina, además del Signis, que concede la Asociación Católica Mundial de la Comunicación.
Esta 43 edición del Festival de Cine, marcada por la censura a filmes como Vicenta B del cineasta cubano Carlos Lechuga, ha recibido escasa promoción por los medios oficiales y una apatía inusual —en comparación con ediciones anteriores— por parte del público de la Isla.
Otro "Perrón" de la dictadura haciendo uso de sus "facultades". Todos estos premios otorgados desde los 60 , fundamentalmente en la mediocre Farándula cubana tienen un marcado carácter ideológico , cediendo por "fidelidad" a la dictadura, la calidad !
Ah, lucidez. Claro. Pero no la ordinaria, que consiste en ver las cosas como son y tratarlas como tales, sino la "revolucionaria," que es algo bien distinto. Bueno, el tipo es lo que es, y lo demuestra. Un asco.
Como en aquel poema de Torriente Brau, ¿estarán calculando su turno próximo después? porque estos premios de honor a la obra de toda una vida siempre huelen a cadaverina.
Amigo John, ese poema es de Ruben Martinez Villena, no de Pablo de la Torriente Brau.
Saludos.