La escritora Teresa Melo atacó a los cubanos que utilizan las redes sociales para criticar los problemas y la vida en Cuba. Melo dijo que esas personas "siempre tienen activado 'el modo oscuro'" y "su visión se expresa en negativo".
Melo cuestionó si los reclamos de cubanos en listas, cartas y firmas son por "fracasos personales enconados" o para mejorar. La escritora enumeró entre ellos a "artista, profesional, desocupado, joven o no, delincuente, negociante, ineficiente, confundido, mercenario, indiferente, centrista, ideólogo, ignorante, todólogo", en referencia —sin mención directa— al Movimiento San Isidro, el grupo 27N y otros activistas de Cuba.
Las críticas de los cubanos —con escasos medios de expresión en un país en el que el Gobierno prohibe la prensa independiente— han aumentado a medida que se han disparado los niveles de pobreza, la escasez de productos de primera necesidad y los abusos y expresiones de fuerza con los que el régimen responde al descontento popular.
Pero, según la escritora, quienes critican los problemas de Cuba "no ven la sonrisa, ven las vestiduras; no ven el abrazo, ven la pared sin pintar; no ven el plato compartido, ven el contenido. Así es difícil hacer creer que su preocupación es más que la búsqueda individual y rapiñera".
La también editora cubana dijo que en las redes transmiten "una visión sesgada". No son "mi buzón de quejas sin sugerencias, ni mi Ministerio de Cultura (MINCULT), ni mi Instituto del Libro, ni mi Gobierno, ni ninguna de las instituciones a las que acudo en vivo y en directo para discutir. Vaya facilidad la seguridad del teclado y la de la vida fuera de él", añadió.
La escritora es una de las privilegiadas dentro de un sistema que solo admite discutir en el MINCULT u otras espacios estatales con "revolucionarios".
Melo, quien es miembro de la oficialista Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), sugirió que quienes piden cambios en Cuba no tienen un proyecto de futuro para el país.
"Por eso no creo en sus demandas, hechas con el peor de los lenguajes o el de las academias, ni en series de quinta categoría, ni en vulgares protestas, ni en reclamos de que les entreguemos nuestros pocos medios para sumarlos a su cadena de repetición, pagada por el dinero del que odia. Un poco de respeto por el sacrificio de Cuba y por la obra y la inteligencia ajenas, que es la nuestra", dijo Melo.
"El amor y la cuota de felicidad posibles que se construyen en medio de carencias tremendas, son también una forma de resistencia", agregó en la opinión reproducida este miércoles por el diario oficial Granma y el medio estatal Cubadebate. Melo hizo la publicación el pasado lunes en su perfil de Facebook.
El Gobierno de Cuba insiste desde hace meses en que en las redes sociales los activistas piden cambios en la Isla a partir de un manual hecho por el Gobierno de Estados Unidos. El vocero del régimen Humberto López aviva cada semana en la televisión estatal el odio contra los artistas y activistas críticos del régimen, a quienes acusa de incitación al caos y al estallido social en el país.
Por su parte, los cubanos encuentran en las redes sociales una vía para denunciar la escasez y los abusos en el país, los problemas en el sistema de salud y la corrupción del régimen.
Todo cubano debe saber chicharronear y chicharronear bien