Mientras el arribo de viajeros a Cuba se sigue desplomando y los campos de la Isla padecen la indefensión estatal y el poco incentivo a la actividad agrícola, el régimen organizará el X Encuentro Iberoamericano de Turismo Rural, según informaron hoy autoridades del sector en la Feria Internacional de Turismo (FITUR), que se desarrolla en Madrid.
La agencia estatal Prensa Latina detalló que el evento tendrá lugar en cuatro provincias cubanas del 29 de septiembre al 5 de octubre. La cita tendrá el lema "Por un desarrollo comunitario exitoso", algo que sus organizaciones promotoras aseguran promover. Dichas organizaciones son el Ministerio de Turismo de Cuba, la Universidad Agraria de La Habana, agencia de viajes estatal ECOTUR S.A y el Instituto Iberoamericano de Turismo Rural (IBEROATUR), con sede en España.
Según recogió la revista Excelencias durante la presentación del programa del evento, este incluirá visitas al Jardín Botánico Nacional, el Cristo de La Habana, la Universidad Agraria, las fincas como Vista Hermosa y Guanabito, Las Terrazas, Soroa, y las plantaciones de tabaco en Pinar del Río.
Raúl Naranjo, director de ECOTUR S.A. dijo que este encuentro "abordará temas clave como el turismo local sostenible, los casos de éxito en agroturismo y las oportunidades de cooperación entre los países de Iberoamérica".
El MINTUR llegó a FITUR buscando una tabla de salvación ante el sostenido declive del sector turístico cubano. En Madrid, el ministro del ramo, Juan Carlos García Granda, anunció que las autoridades de la Isla están organizando un campamento de verano para que los hijos de cubanos emigrados pasen sus vacaciones en el país, presumiblemente en alguno de los destinos de veraneo adonde suelen viajar los visitantes extranjeros. Sin embargo, varios turoperadores y empresas turísticas que mantienen negocios con el régimen pidieron a este elaborar nuevas estrategias para elevar el número de visitantes, algo que parece de muy difícil cumplimiento a corto plazo.
El interés del MINTUR por el turismo rural no es nuevo y, en tal sentido, en septiembre de 2024 organizó el XIV Evento Internacional de Turismo de Naturaleza, en el que, en medio de la crisis de combustible que envuelve a Cuba, al punto de obligar a paralizar el transporte público en algunas zonas, ECOTUR llevó a cabo un safari fotográfico con vehículos todoterreno.
Mientras las autoridades cubanas pretenden exhibir los campos de la Isla como entornos sostenibles y amables para el agroturismo, los campesinos se siguen quejando del trato desfavorable que reciben y las pésimas condiciones para obtener los insumos que necesitan para trabajar, algo que es directamente proporcional a sin precedentes con la que se está reduciendo la producción agropecuaria en Cuba.
No obstante, esos mismos campos servirán ahora para que el régimen intente aplacar su desesperación ante el descalabro del turismo. En diciembre, García Granda reconoció ante la Asamblea Nacional del Poder Popular que el sector cerró 2024 con 2,2 millones de visitantes, por debajo de los 3,2 millones de veraneantes planificados a fines de 2023, e incluso del posterior ajuste a la baja de 2,7 millones.
Canadá siguió a la cabeza como mercado emisor, aunque con alrededor de 40.000 veraneantes menos; seguida por Rusia, con 171.446 (unos 7.000 más que en 2023); EEUU (129.185, unos 14.000 menos); España (60.901, 23.000 menos, un derrumbe del 26,8%); Alemania (59.643, alrededor de 4.000 menos) y México (53.207, creciendo en unos 2.000 clientes).
Este descenso de veraneantes es sostenido en los últimos años: 2,4 millones en 2023 y 1,6 millones en 2022, lejos de los 4,2 millones de 2019 y los 4,6 millones de 2018. Sin embargo, el Gobierno espera recibir 2,6 millones de turistas en 2025, una cifra más realista, pero que supone 100.000 menos que los pronosticados inicialmente para 2024.
