El oficialista Observatorio de Cuba sobre Igualdad de Género, creado recientemente por el Gobierno cubano confirmó este jueves que, en 2023, 110 mujeres fueron asesinadas en la Isla por sus parejas o exparejas. Los casos, que las autoridades del régimen se niegan a llamar feminicidios, superan en 21 a los verificados por los observatorios de Yo Sí Te Creo en Cuba y de la revista Alas Tensas (OGAT), lo que hace la situación aún más preocupante.
La cifra oficial solo recoge aquellos casos que fueron juzgados durante el año pasado y en los que la víctima tenía más de 15 años. Además, el observatorio estatal separó los asesinatos procesados por los tribunales "por motivos de género", 60, de aquellos que, pese a que fueron cometidos por las parejas o exparejas de las víctimas, no fueron juzgados con ese agravante, 50.
Las autoridades expusieron, asimismo, que Cuba cerró 2023 con una tasa de 2,16 feminicidios por cada 100.000 mujeres, lo que convierte al índice cubano en el sexto más alto de América Latina y el Caribe, si se compara con los registros de asesinatos machistas del Observatorio de Igualdad de Género de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de 2022, último año disponible.
Al presentar el observatorio estatal, la fiscal general de la República, Yamila Peña Ojeda, expuso que, en 2023, el 75% de los hechos de violencia de género ocurrieron al interior de las viviendas, tendencias que muestra un aumento en 2024. De las víctimas, dijo, el 72% tenían entre 25 y 59 años, al tiempo que, en el 45% de los casos, eran trabajadoras no remuneradas.
Asimismo, la funcionaria detalló que el 84% de los victimarios eran pareja o expareja de la víctima; el 46% tenía noveno grado de escolaridad; el 60% no mantenía vínculo laboral; y el 31% tenía antecedentes penales de hechos violentos.
Peña Ojeda reconoció lo que los observatorios de género de Yo Sí Te Creo en Cuba y de la revista Alas Tensas han expuesto en numerosas ocasiones: la actuación en posición de dominio; las agresiones motivadas, en la mayoría de los casos, por inconformidades con la ruptura de relaciones; la utilización de hijos en común para infligir más sufrimiento; así como el aumento en el uso de armas blancas o de fuego.
En marzo, al presentar el Informe Anual de Feminicidios en Cuba en 2023, la directora del OGAT, Ileana Álvarez, afirmó que "el Estado cubano es feminicida y olvida a las mujeres". De igual forma, destacó que "2023 fue un año muy dramático para las mujeres cubanas", toda vez que ambos observatorios registraron 89 feminicidios en la Isla en tal periodo, una cifra inferior a la publicada ahora por el Gobierno, en un movimiento poco habitual de aparente transparencia de datos.
Precisamente esa "transparencia" es uno de los temas más preocupantes para los observatorios independientes, que más de una vez han denunciado el ocultamiento de la información por parte del Gobierno cubano y la criminalización de la red de observadoras.
En dicho informe, los observatorios exigieron al Estado cubano "la promulgación de una Ley Integral contra la violencia de género y la creación de refugios y sistemas de rescate para mujeres y sus hijas e hijos en situaciones de peligro".
A pesar de que los datos oficiales referentes a 2024 no son públicos aún, los observatorios independientes han registrado, hasta ahora 31 feminicidios, lo que confirma el preocupante aumento de casos de violencia machista en Cuba.
