El régimen de La Habana y el Gobierno de Brasil, encabezado por Luiz Inácio Lula da Silva, profundizaron su acercamiento este jueves, al suscribir un acuerdo de intercambio y cooperación entre el Partido de los Trabajadores (PT), del mandatario brasileño, y el Partido Comunista de Cuba (PCC).
Minutos antes de la firma, el primer secretario del PCC, Miguel Díaz-Canel, dijo que (los gobiernos de) Cuba y Brasil deben potenciar "más intercambios, todos los años, de delegaciones; que podamos hacer en algún momento eventos teóricos, de reflexiones sobre el tema del Partido, sobre las condiciones en que trabajan cada uno de nuestros Partidos, y sobre las alianzas ante todos los problemas internacionales y globales que tenemos que enfrentar de conjunto", según lo citó el órgano oficial del partido que encabeza, Granma.
Díaz-Canel describió la firma del acuerdo como "un paso que nos ayuda" y expresó la "máxima disposición y voluntad" para ofrecer apoyo al partido brasileño en todo lo que necesiten, de acuerdo con el medio estatal.
Al recibir a la presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, quien suscribió el acuerdo por la parte brasileña —por el PCC firmó el miembro del Buró Político y secretario de Organización del PCC, Roberto Morales Ojeda—, Díaz-Canel envió un abrazo a Lula da Silva y afirmó que, desde la llegada de este al poder, se han "intensificado todo un grupo de acciones de apoyo a (el Gobierno de) Cuba".
Como parte de esas acciones, todas las semanas viajan a Cuba una o dos delegaciones de empresarios brasileños o representantes de ministerios, de acuerdo con el gobernante.
"Hay una comunicación muy fluida y varios proyectos que están avanzando, que yo creo que van a ser de beneficio mutuo, que nos ayudan mucho a nosotros en medio de una situación complejísima que estamos atravesando ahora por el bloqueo recrudecido que se siente fuertemente y, sobre todo, por la inclusión de Cuba en la lista de países que, supuestamente, apoyan el terrorismo", citó Granma.
El régimen cubano no pierde oportunidad de achacar al embargo estadounidense todas las penurias que sufren los residentes en la Isla. No obstante, las inversiones de La Habana en el sector turístico permanecen inmunes a las políticas de EEUU e incluso a la propia crisis que ahoga a la población, como muestran las cifras oficiales de la estatal Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).
Entre enero y diciembre de 2023, los denominados servicios empresariales, actividades inmobiliarias y de alquiler recibieron 23.744,8 millones de pesos, poco más que los 23.359,6 de igual periodo de 2022.
Si se suma a lo anterior lo invertido en hoteles y restaurantes (otra categoría que tributa al negocio turístico), que fue 8.626,4 millones (casi el triple que los 3.226,5 del año anterior), entre ambas suponen un tercio del total de 96.622 millones de pesos gastados en los principales sectores que contiene el resumen de la ONEI, por encima de los 71.069 millones de 2022.
Pese a la crisis alimentaria que viven los cubanos, el incremento de la inversión en agricultura, ganadería, caza y silvicultura (2.966,7 millones, frente a los 1.855 del año previo) es ínfimo. Lo mismo ocurre con la pesca (657,6 millones en 2023; 511,9 en 2022).
Ante la crisis en la que se hunde Cuba, el Gobierno de Lula da Silva podría convertirse en el nuevo benefactor que necesita régimen, o al menos eso parece esperar Díaz-Canel.
En marzo, el mandatario brasileño envió a la Isla a su ministro de Estado de Desarrollo Agrario y Agricultura Familiar de Brasil, Paulo Teixeira, quien firmó diez proyectos con el Gobierno de Cuba, como parte de la "intensidad" de las relaciones bilaterales.
En febrero, un cargamento de leche en polvo, arroz, maíz y harina de soja de Brasil arribó a Cuba, tras ser enviado a través de un convenio financiado por Emiratos Árabes Unidos, a raíz de una colecta internacional realizada durante la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP-28).
Aunque Díaz-Canel afirmó que los proyectos entre Brasil y Cuba serán en beneficio mutuo, no se sabe qué puede aportar la Isla, sumida en una profunda crisis y llena de deudas.
Brasil fue uno de los principales receptores de profesionales de la salud exportados por el régimen cubano, mediante el programa Más Médicos, que, como reveló DIARIO DE CUBA en una investigación en 2018, fue una propuesta de La Habana.
En Venezuela, que ha sido el principal salvavidas del régimen cubano desde la llegada al poder del difunto Hugo Chávez, los profesionales de la salud exportados fueron utilizados para hacer propaganda a favor del chavismo y apuntalarlo en el poder, según las denuncias de muchos médicos cubanos, recogidas en los informes de la ONG Prisoners Defenders y en testimonios ofrecidos a DIARIO DE CUBA.
Gleisi tiene fama de ladrona en Brasil , en el seno del pueblo y ya se está embarrando con el lechón Canel. Cuidado Gleisi que Canel es más bandido que tu y el ladrón Lula!