Los rescatistas que trabajan desde la noche del martes en el edificio que sufrió varios derrumbes en La Habana Vieja extrajeron otro cuerpo sin vida de entre los escombros de la edificación, por lo que la cifra de fallecidos en el siniestro ascendió a tres.
De acuerdo con el periodista del oficial Canal Caribe, Lázaro Manuel Alonso, este cadáver "se presume sea de Ramón Páez Frómeta, quien se encontraba en el lugar al momento de ocurrir el incidente y estaba reportado como desaparecido", escribió en su muro de Facebook.
Según los reportes de la prensa oficial, que han hecho una inusual cobertura del suceso, bastante común en esta zona de La Habana y en otras ciudades del país, hombres y máquinas trabajan para despejar el acceso al edificio, ubicado en la calle Lamparilla No. 388, esquina a Villegas, en el municipio donde más derrumbes ocurre en la Isla y cuyos inmuebles en general sufren un notable deterioro.
Miguel Díaz-Canel dedicó durante el miércoles varios tuits a los sucesos. En uno de ellos aseguró estar pendiente de lo ocurrido, mientras que luego lamentó el "doloroso" fallecimiento bajo los escombros de Yoandra Suárez López, de 40 años, técnica en rescate y salvamento con más de 11 años en la labor, y Luis Alejandro Llerena Martínez, de 23 años, rescatista profesional.
"Su heroísmo, probado en múltiples ocasiones, merece nuestro más sentido homenaje", aseguró.
En el foro de esa publicación, el internauta cubano Alain Alemany Arana le ripostó: "Hay cientos de víctimas de otros derrumbes que también tenían nombres y apellidos, por si no lo sabías, que no son más importantes que estas, pero que te has callado en su momento. Mientras tanto, me ofrezco como rescatista para cuando se derrumbe lo que se tiene que derrumbar".
El colapso ocurrió alrededor de las 11:00PM del martes. Alexis Acosta Silva, intendente de ese municipio, dijo al periódico oficial Granma que se encontraban en el interior del edificio 13 núcleos familiares, para un total de 54 personas. Al Hospital Calixto García fueron trasladados dos lesionados, añadió.
Según Acosta Silva, las familias afectadas fueron evacuadas y ubicados en un primer momento en la escuela secundaria Jorge Arturo Vilaboy Viñas, donde se les prestó la atención requerida tanto por los servicios paramédicos como logísticos, incluida alimentación. Posteriormente, algunas personas se fueron a casas de familiares y amigos.
Este más de medio centenar de vecinos de La Habana Vieja se suma a los cientos de damnificados por derrumbes que hoy siguen sin una solución de vivienda prometida por el Gobierno. Muchas de estas personas permanecen en albergues en deplorables condiciones.
Ya viene el apagón nacional. Este apagón a lo largo y ancho de Cuba es una arma para la liberación. Que las noches oscuras sean iliminadas con las llamas de los edificios estatales. Incendien edificios del gobierno, pinchen neumáticos de patrullas. Todo el daño que se le haga a la Mafia es poco.
Cuba se está literalmente derrumbando.