Las plataformas independientes cubanas Observadores de Derechos Electorales (ODE), Comisión Cubana de Defensa Electoral (COCUDE) y Ciudadanos Observadores de Procesos Electorales (COPE) denunciaron que las "elecciones" realizadas este 26 de marzo en Cuba fueron las más irregulares llevadas a cabo en el país desde 1976.
Las plataformas señalaron que las autoridades electorales "normalizaron las anomalías de forma, violatorias de la Ley Electoral 127, que se han observado en los últimos procesos electorales" como la "no publicación de los padrones electorales con el tiempo de antelación requerido, colegios electorales en los que aquellos no fueron colocados a la vista de los electores, o colegios electorales en los que votaban personas no inscritas".
En algunos casos, explicaron las plataformas en una declaración conjunta enviada a la redacción de DIARIO DE CUBA, fueron eliminados de los padrones "electores que gozan de todos sus derechos civiles y políticos, incluido el requisito, contradictorio con la Ley y la Constitución, de residencia efectiva para otorgar el derecho al voto a ciudadanos cubanos que poseen residencia en el país legalmente reconocida".
"En segundo lugar, se asumió como normal la práctica excepcional de llevar las boletas a las casas de los electores, una forma de coacción del voto a través de un procedimiento concebido para las personas con discapacidad o que por circunstancias específicas no pueden acudir a los centros de votación. Médicos y pacientes reportan, asimismo, que hubo coacción por el voto en los hospitales".
Las plataformas se refirieron además a "la práctica de coacción inocente y vicaria del voto utilizando a los niños en la llamada operación Tun Tun", para lograr que más personas fueran a votar.
"En tercer lugar, se introdujo una práctica en contradicción con la naturaleza cívica del voto, en el que el acto de votar surge del compromiso social de los electores con el sistema político, no de las promesas de beneficios materiales", recordaron las plataformas y denunciaron "el concurso electoral a través de las redes sociales, premiable con computadoras, teléfonos móviles o vacaciones pagadas se agrega a la realización de ferias de ventas de mercancías a precios irreales y extra mercado para la incitación instantánea del voto, una práctica política que atenta contra los valores cívicos y de ciudadanía".
A todo ello, añadieron, en cuarto lugar, la represión desatada contra activistas y observadores que pretendían monitorear el escrutinio "tal y como autoriza y respalda la Ley, y en congruencia con el llamado hecho por Alina Balseiro, presidenta del Consejo Electoral Nacional, para que todos los ciudadanos acompañaran el conteo de los votos".
En contradicción con ese llamado, "en muchos colegios electorales se le negó la entrada a cualquier ciudadano, y muchos de ellos, también activistas, fueron detenidos, sus casas sitiadas, amenazados con fuertes represalias y hasta golpeados por el ejercicio de sus derechos constitucionales".
Por todo lo anterior, las plataformas expresaron "serias dudas sobre los resultados que se ofrecieron a lo largo de la votación y que no parecen corresponderse con la rigurosa observación independiente, con los testimonios espontáneos de la ciudadanía y con la profusión de imágenes, índices todos en la dirección de mostrar la baja participación ciudadana en la votación a lo largo del país".
"Extender la votación por una hora más, sin razones de fuerza mayor como establece la Ley Electoral, agrega una cifra de votantes extra legales, que agrega más dudas al escrutinio cerrado de la jornada electoral. Ello abona la sensación ciudadana, que comienza a aflorar, de que las cifras oficiales de participación no concuerdan con el comportamiento real del electorado", declararon las plataformas.
El documento fue firmado por Marthadela Tamayo González, de ODE; Zelandia de la Caridad Pérez Abreu, de COCUDE, y María Mercedes Benítez Rodríguez, de COPE, quienes consideraron, de manera preliminar, que las autoridades electorales de Cuba "no han respetado los marcos y procedimientos establecidos por la Ley 127, al país y a la auténtica voluntad de las y los electores".
CUBALEX reporta acciones represivas en torno a los "comicios" de este 26 de marzo en Cuba
El grupo de Asesoría Legal Cubalex publico una lista de las acciones represivas que pudo detectar, en torno a las votaciones del 26 de marzo. De esas acciones fueron víctimas al menos 25 activistas y periodistas independientes, según la publicación de la organización en Facebook. Las acciones tuvieron lugar en La Habana, Camagüey, Villa Clara, Matanzas, Santiago de Cuba, Holguín, Mayabeque y Artemisa.
Las principales formas de represión fueron la vigilancia y el sitio policial, del que fueron víctimas, entre otros activistas y periodistas indepedientes, Zelandia de la Caridad Pérez Abreu y su esposo, el periodista independiente Juan Moreno, fueron sitiados en su vivienda en impedidos de salir.
Además, varios activistas y periodistas independientes, reportaron cortes del servicio de internet por datos móviles. En ese caso estuvieron la periodista habanera Yunia Figueredo, y los periodistas de La Hora de Cuba Henry Constantín, Neife Rigau e Iris Mariño, de Camagüey. La vivienda esta última estuvo vigilada por personas vestidas de civil.
Las Damas de Blanco Caridad Burunate y Maritza Acosta fueron detenidas en Colón, Matanzas, para impedirles asistir a misa. Burunate estuvo detenida en la terminal de ómnibus desde las 11 de la mañana hasta las 12:30 PM y Perdomo estuvo detenida en el Comité Militar desde las 10:00 a.m. hasta el mediodía.
A Manuel Cuesta Morúa y a María Mercedes Benítez les impidieron salir de sus casas para realizar la observación electoral. No obstante, Cuesta Morúa pudo observar la participación en colegios de Alamar, Habana Vieja y Centro Habana, y aseguró a DIARIO DE CUBA que había sido baja.
No pueden reportar menos del 68% de participación porque el gobierno hace el ridículo a nivel nacional y global.
Y las anteriores no eran tan irregulares (fraudulentas) y circenses?