Cuba se enfrenta a una de las sequías más intensas de los últimos años, y al menos 400.000 cubanos padecen de problemas con el suministro de agua, informa el diario estatal Granma.
El presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidraúlicos (INRH), Antonio Rodríguez Rodríguez, señaló que 90.000 cubanos en Guántanamo tienen problemas con el abastecimiento de agua, siendo la provincia en peor situación. Le sigue Camagüey con 60.000; Santiago de Cuba con más de 50.000 y La Habana con más de 47.000 cubanos con déficit en el suministro de agua, señala Granma.
En los diez primeros días de este mes, 137 municipios de Cuba, de los 169 que existen, no registraron precipitación alguna, precisó el diario oficialista.
La viceprimera ministra, Inés María Chapman Waugh, expresó que "las provincias orientales tienen ejecutadas inversiones para enfrentar esta sequía, que necesitan activar", pero no se ofreció más detalles sobre las medidas a tomar para enfrentar el déficit de agua.
A finales de febrero, según reportes oficiales, había 270.000 cubanos con problemas para abastecerse de agua, y en tan solo dos semanas la cifra ha aumentado en 130.000.
Para la segunda semana de febrero, los embalses del país habían perdido 156,3 hectómetros cúbicos de su capacidad de llenado. Todas las provincias presentaron disminución en su almacenamiento, dijo en ese momento Hugo Ramos López, especialista de la Dirección de Hidrología e Hidrogeología del INRH.
El funcionario expresó que de los 88 embalses utilizados en el abasto de agua a la población, solo el 54% se encuentra con su capacidad de llenado útil. De esos embalses, 18 reportan menos de un 25% de su capacidad de almacenamiento.
Sobre las cuencas de aguas subterráneas, el experto puntualizó que de las 100 reportadas en la nación, 87 se encuentran en estado normal. De estas cuencas, 11 presentan una situación desfavorable, y una en estado crítico.
Entre las consecuencias negativas de la sequía se encuentra el aumento de incendio forestales, entre los que destaca el recién extinguido en Pinares de Mayarí, Holguín.
El siniestro arrasó con más de 5.300 hectáreas de bosque, y constituye uno de los peores en los últimos 40 años en Cuba.
Los culpables favoritos del HP en jefe: el embargo y la sequía.
Los culpables favoritos del HP en jefe: el embargo y la sequía.