Más de 5.000 núcleos habaneros dejaron de recibir los cinco productos correspondientes al segundo ciclo mediante el sistema de distribución controlada, implementado por el Gobierno. Los cubanos afectados no aparecían en los listados digitalizados, requisito indispensable para adquirir los productos.
Fueron identificados 5.300 núcleos perjudicados, según una publicación en Facebook de la periodista oficialista Iraida Calzadilla, replicada por el medio estatal Tribuna de La Habana. La publicación acotó que esos núcleos representaban "menos del 20 por ciento de los registrados en la capital". Los hechos fueron denunciados por más de 2.000 consumidores.
Los municipios más afectados fueron Cerro y Diez de Octubre, mientras en La Habana Vieja, Centro Habana y Regla, los consumidores tuvieron menos afectaciones y ya transitan hacia el tercer ciclo de adquisición de los productos.
La digitalización, explicó el medio estatal, se hizo a través del sistema de la empresa nacional XETID. Según la nota replicada por Tribuna de La Habana, esta empresa pertenece a la Universidad de Ciencias Informáticas. En los comentarios a la publicación un usuario lo desmintió. En la digitalización intervinieron también otros organismos en los que se incluye Comercio.
Con todos los involucrados se realizará una evaluación integral para depurar responsabilidades sobre lo ocurrido en la capital cubana, señaló Tribuna de La Habana.
La buena noticia, en medio de la crónica escasez de alimentos que enfrentan los cubanos es que se trabaja para que las personas afectadas puedan recibir el segundo ciclo de distribución de los productos.
Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en La Habana, y Reinaldo García Zapata, Gobernador en el territorio, ratificaron que no se puede quedar ningún núcleo sin el derecho a adquirir los cinco productos establecidos en cada ciclo, destacó el medio estatal capitalino.
La distribución del segundo ciclo perdido ya comenzó en el municipio de Plaza de la Revolución. En ningún municipio se afectará la entrega del tercer ciclo, pues quienes no hayan recibido el segundo, adquirirán los dos a la vez y en el establecimiento que le corresponde.
Tribuna de La Habana señaló que, pese a lo sucedido, no se demeritaba el trabajo realizado para beneficiar a la población con la entrega de los alimentos de forma más adecuada. Añadió que mediante entrevistas, encuestas, guías de observación e índices de satisfacción del cliente, "se ha comprobado la aceptación de esta medida que permite adquirir los productos de forma más adecuada y expedita".
Sin embargo, el propio medio estatal publicó a finales de diciembre de 2022, sobre "desorganización, desorden, mala información y muchas otras cosas" sucedidos en la TRD Caribe ubicada en la Calzada de Vento y Avenida de Acosta, Cerro. Según denuncias de los propios lectores del medio oficial, esos hechos se repetían en la mayoría de las tiendas incluidas en el sistema.
"Me consta que en la tienda citada por la denuncia de Tribuna campean la mala organización y la falta de comunicación. Asuntos que atentan contra el propósito de un sistema diseñado para mayor equidad en el acceso a los alimentos. Hasta allí iremos con cámaras y micrófonos", prometió entonces el periodista oficialista Lázaro Manuel Alonso en su perfil de Facebook.
Varios comentarios a la publicación de Tribuna de La Habana sobre los consumidores afectados en el segundo ciclo de distribución permiten suponer que la situación no ha mejorado en dos meses. También, que esta no es la primera vez que algún habanero deja de adquirir un ciclo porque no aparecía en los listados digitalizados.
"Por fin, ya era hora, pero se habla del segundo y tercer ciclo, pero del primero ni hablar. Por la mala organización y el mal trabajo que tuvieron no lo pude coger, porque no aparecía en el listado; ahora bien, yo pregunto quién paga el primero porque desde agosto no cojo aceite; desde octubre ni pollo ni perrito ni nada y he ido a todos los lugares y son informaciones falsas; antier mismo la última la dio el que está al frente del Poder Popular, que no vive en el cerro vive en Guanabacoa y nunca está, que pasáramos por la Oficoda a recoger un papel para comprar los módulos faltantes, cosa que era mentira. La directora de la Oficoda no tenía conocimiento ninguno y seguimos con la mala información y haciendo que el pueblo se sienta mal con tanta falta de respeto", escribió Rafael Suárez Fernández.
"Me deja perpleja el artículo, pero no entiendo yo he publicado por aquí varias quejas. No tengo Facebook no me gusta, pero igual creo que se nos tiene que prestar atención a nuestras quejas o para qué nos piden el correo electrónico. Por ahí pudiera recibir una respuesta lo cual no pasa. Vivo en el municipio Guanabacoa, compro en la TRD del Nalón del mismo reparto y aquí la vida sigue igual. ¿Y el pollo del segundo ciclo para cuándo? Y eso para no contar que con los cigarros hay tremenda indisciplina, los carteles no cambian, siempre son los mismos a comprar y eso que no es un artículo de primera necesidad. A mí nunca me toca, yo soy el 996 y cuando entra otro producto no comprendido en los cinco se pierden en una serie de listados que solo los cogen los mismo... Es decir, sigo sin entender", dijo Ibis Suárez.
"La bodega de nosotros en Micro X Alamar Habana del Este compraba en el CUPET antes de llegar a Bacuranao. Por múltiples circunstancias nos sacaron y nos mandaron a comprar en el Progreso a principio del mes de enero y hasta está fecha nadie sabe nada cuándo nos toca ni nada por el estilo, habiendo en Micro el DITU que esta subutilizado y el Rapididito, que ahora dicen se lo entregaron a un cuenta propia. Y mientras tanto, en el banco de la paciencia", se quejó Ángel Calvo.
libreta de racionamiento= miseria repartida.