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TELECOMUNICACIONES

El Gobierno cubano pone fecha a la operatividad del cable submarino de fibra óptica enlazado con Martinica

Funcionarios advierten que el cable mejorará la conexión a internet en Cuba, pero no será 'la panacea'.

Cienfuegos
Un cable submarino de fibra óptica.
Un cable submarino de fibra óptica. Test de velocidad.

El cable submarino de fibra óptica que enlazará a Cuba con la isla de Martinica debe estar operativo en abril. Así lo informaron este domingo funcionarios de ETECSA al periódico estatal 5 de septiembre.

"El cable submarino supondrá la mejora de la conexión a internet del país y la provincia, y a partir de su operatividad podría empezar a ofertarse tráfico y conexión para Cuba", dijo Jesús Enrique Vázquez Martínez, jefe del Departamento de Inversiones de ETECSA en Cienfuegos, provincia en donde se comenzaron los trabajos de instalación del cable. 

''La instalación del nuevo cable va a ayudar a que la conexión mejore, lo cual no significa que en abril sea la panacea, aunque sí es un hecho del alivio que supondrá a la congestión de la navegación'', añadió Alvin Danilo Cordero Hernández, jefe de las unidades de Redes Inalámbricas de ETECSA.

La instalación de ese cable, de 2.500 kilómetros de longitud, forma parte de un acuerdo alcanzado el pasado año entre la firma francesa Orange y el monopolio estatal de las telecomunicaciones ETECSA

El 9 de diciembre pasado comenzó el despliegue del cable desde el puerto Tricontinental de Cienfuegos. ETECSA dijo entonces que el cable permitiría, "de acuerdo con las posibilidades económicas del país, continuar ampliando la conectividad internacional", una de las más restringidas, vigiladas y caras del mundo, según informes internacionales.  

Los cubanos se quejan constantemente del mal servicio que ofrece ETECSA. Entre las quejas, destacan la pérdida de saldo, la lentitud o ralentización de la conexión, la interrupción intermitente del servicio de datos móviles, entre otras afectaciones. 

La compañía justifica las constantes dificultades en el servicio con congestiones en la red y el crecimiento de las líneas móviles en el país. 

Cuba está conectada a Venezuela a través del cable submarino ALBA-1, pero a pesar de ello la conectividad a internet en la Isla es cara y lenta; mientras, el régimen bloquea sitios web, castiga a quienes usan las redes sociales para publicar críticas en su contra e impone cortes del servicio durante protestas y oleadas represivas, para evitar la difusión de información que le afecte.  

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