La producción de arroz en Cuba, que nunca ha satisfecho la demanda nacional, ha caído en picada desde 2018 hasta la actualidad, reconoció el diario oficial Granma que, sin embargo, no dijo a cuánto ascendió la producción del grano en 2022.
"En la década en curso la producción arrocera se ha visto muy limitada debido, en lo fundamental, a la carencia general de insumos, así como de las piezas de repuesto para las combinadas arroceras", expresó Oslando Linares Morell, director de la División Tecnológica del Arroz, del Grupo Empresarial Agrícola, adscrito al Ministerio de la Agricultura.
El funcionario aseguró que el Programa Integral del Arroz, un plan de ese Ministerio para alcanzar el autoabastecimiento del grano en el año 2030, difícilmente llegue a cumplirse, pues de las 200.000 hectáreas necesarias de siembra para alcanzar las 600.000 toneladas de arroz que cubren la demanda nacional, en este 2023 el plan previsto a sembrar es de apenas 68.000.
El reporte, como es habitual en la prensa oficialista, culpa al embargo estadounidense de la baja producción de arroz, así como también a los efectos de la pandemia y la guerra en Ucrania. Para ninguna de esas justificaciones pone un ejemplo concreto de la manera que se vio afectada la producción del grano por estos factores externos.
Otros reportes de la misma prensa estatal admiten que los problemas para aumentar la producción de arroz provienen, en realidad, de la Tarea Ordenamiento, debido al impacto que ha tenido esta política en los costos de producción.
"Me facilitaron dos caballerías de tierra, las cuales están roturadas por la ficha de costo vieja. El arroz necesita no menos de cuatro labores, que me salía como en 5.000 pesos, ahora son 10.800, solo en la preparación, sin contar lo demás en lo que hay que invertir", se quejó el campesino Loivan Hano Abrahantes al diario oficial Guerrillero de Pinar del Río.
"Lo que explicó el viceprimer ministro (Jorge Luis Tapia Fonseca) en su visita fue que lo mínimo por hectárea era alrededor de 13.000 pesos de ganancia, pero ahora le cambiaron el precio a todo: el agua, la semilla, la aviación, y si encima no hay paquete tecnológico, prácticamente sembramos a riesgo. Eso no fue lo que dijeron al principio", añadió Hano Abrahantes.
Este y otros campesinos en Pinar del Río también se quejaron de las trabas que impone el Gobierno para la financiación y obtención de recursos para producir.
"Hay muchos productores que tienen que solicitar un crédito y 53 de ellos son desvinculados. Primero deben hacerse clientes del Banco, y de acuerdo con su política, deben presentar un codeudor con no menos de 35.000 pesos en una cuenta fija. Quiere decir que esa persona va a pasar un poco más de trabajo para comenzar a producir la tierra", explicó Yoannis Campos Segura, presidente de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Jorge González Ulloa.
"Ante la falta de urea aplicamos el fitomas, con cuatro pases, en la etapa que indican los especialistas, puedes obtener buenos rendimientos. Es una buena alternativa que sustituye el paquete tecnológico, pero el arroz lleva muchas cosas y no todos los que se incorporan ahora cuentan con el efectivo para hacerlo'', explicó el campesino Agustín Echavarría, con 15 años de experiencia en la siembra del arroz.
Un reporte de Granma de febrero de 2022 aseguraba que el plan previsto de producción de arroz ese año era de 180.000 toneladas, muy lejos de las 304.000 toneladas alcanzadas en el 2018. Sin embargo, esta última cifra representa apenas la mitad de lo que necesita el país para el consumo nacional. El resto, el Gobierno de Cuba lo importa fundamentalmente de naciones asiáticas.
Con cierta frecuencia, tanto China como Vietnam, dos aliados del régimen de La Habana, hacen donaciones de miles de toneladas de arroz al país, que ayudan a paliar la deprimida producción nacional de un producto básico en la dieta del cubano y salvavidas ante la escasez de otros alimentos.
“Pa lo que sea Fidel, pa lo que sea”.
En Cuba falta hasta la vergüenza sobre todo de los dueños de las barrigas orondas que se desplazan por los barrios en plan "aquí estamos para lo que necesiten" aunque luego no cumplan ni c...
Escasez de leche (sin vasito y con vasito), de arroz, y de frijoles y de plátanos, de carne de ave y porcina (porque de res ni existe), y hasta de boniatos.
😉
...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro...y otro y la cadena es interminable