Un grupo de campesinos de Pinar del Río manifestaron su arrepentimiento de haber pedido tierras en usufructo para sembrar arroz, debido al impacto de la Tarea Ordenamiento en el alza de los costos de producción, publica el diario estatal Guerrillero.
En un inicio, motivados por las supuestas ganancias que obtendrían, —según les había expresado el viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca en una visita—, estos campesinos pidieron tierras de las 1.000 hectáreas liberadas por la estatal Empresa Agroindustrial de Granos (EAIG) del municipio Los Palacios.
Las trabas y los aumentos en la ficha de costo, los llevaron a cambiar de parecer en muy poco tiempo.
"Me facilitaron dos caballerías de tierra, las cuales están roturadas por la ficha de costo vieja. El arroz necesita no menos de cuatro labores, que me salía como en 5.000 pesos, ahora son 10.800, solo en la preparación, sin contar lo demás en lo que hay que invertir", se quejó el campesino Loivan Hano Abrahantes.
"Lo que explicó el viceprimer ministro en su visita fue que lo mínimo por hectárea era alrededor de 13.000 pesos de ganancia, pero ahora le cambiaron el precio a todo: el agua, la semilla, la aviación, y si encima no hay paquete tecnológico, prácticamente sembramos a riesgo. Eso no fue lo que dijeron al principio", añadió Hano Abrahantes.
"Si yo sé que iba a ser así, no pido tierras. Me dieron dos caballerías y estoy agradecido porque antes era difícil coger un área. Pero con esos precios no se puede", dijo el joven campesino Yoserky López Llobera.
Otro de los inconvenientes que tienen estos productores es la demora en otorgarles un crédito y en el pago, este último se ha demorado hasta cinco meses.
"Hay muchos productores que tienen que solicitar un crédito y 53 de ellos son desvinculados. Primero deben hacerse clientes del Banco, y de acuerdo con su política, deben presentar un codeudor con no menos de 35.000 pesos en una cuenta fija. Quiere decir que esa persona va a pasar un poco más de trabajo para comenzar a producir la tierra", explicó Yoannis Campos Segura, presidente de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) Jorge González Ulloa.
Para los campesinos que se inician y con el objetivo de aumentar la producción, Campos Segura sugiere que el banco otorgue una parte del crédito en efectivo. Con ese dinero, el campesino pudiera contratar a particulares para que también trabajen la tierra.
A las dificultades financieras se suman la falta de recursos para producir. Así lo manifestó Agustín Echevarría, con 15 años de experiencia en la siembra de arroz: "Ante la falta de urea aplicamos el fitomas, con cuatro pases, en la etapa que indican los especialistas, puedes obtener buenos rendimientos. Es una buena alternativa que sustituye el paquete tecnológico, pero el arroz lleva muchas cosas y no todos los que se incorporan ahora cuentan con el efectivo para hacerlo'".
''Para esta zona aquí no es igual la atención. Lo de nosotros es al pecho. A raíz de la visita de Tapia Fonseca es que se está viendo algo. Ahora se incorporan más de 50 productores, ¿cómo van a sembrar, con qué recursos, de dónde van a sacar dinero para eso?'', cuestionó este campesino.
En abril de 2021 el Gobierno cubano aprobó un paquete de 63 medidas dirigidas a dinamizar la producción en diferentes áreas de la agricultura cubana, pero estas han resultado un completo fracaso.
El propio ministro del ramo, Ydael Pérez Brito, reconoció en un informe presentado en marzo de este año, que el 2021 había sido uno de los peores en la producción de alimentos de la última década.
El pasado año un total de 180 empresas estatales cerraron con pérdidas de 9.000 millones de pesos, lo que equivale a unos 90 millones de dólares.