El sindicato único de Cuba sigue el guion del régimen contra la marcha cívica del 15N

La Central de Trabajadores de Cuba (CTC), único sindicato legal en la Isla y que responde al Partido Comunista (PCC), acusó a "operadores políticos internos, conducidos y alentados desde el exterior" de atentar contra los "esfuerzos" de "recuperación" del país tras la pandemia de Covid-19, al convocar una marcha cívica por el cambio y contra la violencia en noviembre.

"Según el propio articulado de la Carta Magna, el ejercicio pacífico contempla no atentar contra otros, ni vulnerar la paz ciudadana ni estimular la reversión del orden establecido. Una actuación lícita no puede lesionar los derechos de otras personas, afectar la seguridad colectiva, el bienestar general, el orden público, y siempre debe realizarse bajo el respeto a la Constitución y a las leyes", dice la CTC en una declaración recogida por la oficial Agencia Cubana de Noticias, que repite los argumentos ya esgrimidos por el régimen al dejar claro que el derecho a manifestación en la Isla es solo para el castrismo.

Para el sindicato único, "los objetivos mal disimulados son provocar un cambio del sistema político en Cuba y la vuelta al capitalismo".

Vincula a los promotores de la marcha cívica por el cambio con "elementos que desde el exterior vociferan en favor de una intervención militar de Estados Unidos", a los que califica de "connotados terroristas, personeros de la contrarrevolución en la Florida".

Estas acusaciones sin pruebas se reiteran una y otra vez en los ataques del régimen a través de los medios oficiales que controla, pese a que los promotores de la marcha cívica por el cambio han negado tales pretensiones en varias declaraciones públicas a través de la plataforma ciudadana Archipiélago.

Como suelen hacer las declaraciones de las organizaciones de masa controladas por el PCC, el texto generaliza y dice que todos "los trabajadores cubanos, unidos en torno a la Central de Trabajadores y a los sindicatos, que avanzan en la construcción de la nueva sociedad y en la actualización del modelo económico para edificar un país mejor" rechazan "enérgicamente a quienes promueven actos desestabilizadores".

Para concluir, la CTC utiliza palabras del difunto dictador Fidel Castro con las que acusa también a los promotores de la marcha cívica de querer provocar un derramamiento de sangre y los amenaza: "¡No le vamos a dar garantías a la contrarrevolución, que es lo que quieren! (…) ¿Hacerle el juego a los que están dispuestos aquí a hacer correr la sangre de millones de personas? No tenemos por qué tolerarlo. Y no lo vamos a tolerar (…) Los contrarrevolucionarios no tendrán aquí ninguna tribuna. Los contrarrevolucionarios no tendrán aquí ningún derecho a hacer campañas contra la Revolución".

Miembros del equipo de la plataforma ciudadana que organiza las manifestaciones en la Isla ratificaron a través de un video compartido en sus redes sociales que saldrán a las calles el 15 de noviembre y que contra la violencia policial responderán "con civismo y más civismo".

Más recientemente, Archipiélago recomendó que, si hay represión, los manifestantes reciten versos de José Martí. Sugirió una serie de principios que deben seguir las personas que salgan a las calles en noviembre, que descartan las vías de violencia y otras cuestiones que el régimen utiliza para desacreditar la iniciativa ciudadana.