El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) denunció que el Gobierno de la Isla ejecuta una "ocultación masiva de información" sobre los efectos del Covid-19, y que las autoridades mienten sobre la situación de colapso hospitalario que se vive en el país, mientras se falsifican oficialmente los certificados de defunción.
"El problema es grave. La Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud deben actuar inmediatamente", demandó la organización con sede en Madrid en un comunicado.
"Todos los días recibimos informaciones de nuestra red de observadores en la Isla, donde se relatan escenas dantescas sobre la situación con el Covid-19. Los hospitales están colapsados en algunas provincias, los fallecimientos podrían triplicar las cifras oficiales y el sistema de salud cubano sencillamente se ha quebrado", afirmó Alejandro González Raga, director ejecutivo del OCDH.
Según el organismo, entre esos reportes está el de la grave situación que viven los pacientes del Hospital Provincial de Ciego de Ávila, la provincia donde más muertes por el nuevo coronavirus se reportan oficialmente en los últimos días, "donde no hay enfermeros desde las ocho de la noche y existe un solo médico cubriendo tres salas de Covid".
Asimismo, según el OCDH, el personal sanitario no tiene los equipos de protección adecuados. "No hacen un leucograma básico, no hacen rayos X, no hay jeringuillas, no hay anticoagulantes, no hay antibióticos, no hay vergüenza", denunció un médico de Ciego de Ávila, cuyo nombre el Observatorio no reveló.
"Se está enfermando gente, no importa cuál vacuna cubana recibiera. Igualmente se mueren. Lo único cierto es que esas estadísticas no se reflejan en ningún lado. Es parte de la política de este Gobierno, tratar de aparentar una tranquilidad que no existe", insistió otro profesional.
"No hay cómo tratar pacientes en Cuba, ni complementos tan simples como el oxígeno. Es duro y triste (...) Nos estamos muriendo poco a poco. Aquí en Guantánamo estamos cayendo como moscas, sin palabras", dijeron dos médicos de la oriental provincia a los observadores del OCDH.
González Raga subrayó que entre las denuncias más frecuentes está la falsificación de los certificados de defunción de muchos fallecidos, algo que "se repite en todas las regiones del país".
"El Gobierno ha decidido no mencionar el Covid-19 como causa en documentos oficiales de defunción de centenares de personas. A cambio, registra que falleció por tromboembolismo pulmonar o neumonía", añadió, confirmando denuncias publicadas meses atrás por DIARIO DE CUBA.
El OCDH describió una "situación dantesca en Santiago de Cuba, donde un centenar de cadáveres se apilaron en el hospital provincial, sin refrigeración, según funcionarios cercanos al problema: 'Tuvieron que buscar camiones para llevarlos a los cementerios, no había ni suficientes ataúdes. En Santiago están enterrando fallecidos en fosas comunes de los cementerios de Siboney, El Cobre, Juan González y El Cristo, por falta de capacidad. Ninguno de esos muertos está en las cifras oficiales de fallecidos'".
El Observatorio llamó al Gobierno cubano "a pedir y aceptar toda la ayuda humanitaria internacional, y no de forma selectiva, como ha venido sucediendo hasta ahora. El problema es grave. La ocultación masiva de información sobre la saturación de los hospitales, la falta de insumos médicos básicos y la falsificación de los certificados de defunción, para ocultar el motivo de las muertes, resultan intolerables y deben ser denunciados".
A pesar de ello, la campaña en redes sociales #SOSCuba, que pidió a las autoridades de la Isla la apertura de un canal humanitario para llevar medicamentos y alimentos, fue calificada por La Habana como una iniciativa "injerencista".
No obstante, después de las inéditas manifestaciones masivas que estallaron el 11 de julio pasado, el Gobierno decidió autorizar la importación por los viajeros que lleguen a Cuba, sin el pago de aranceles, de cantidades ilimitadas de esos productos, hoy deficitarios en el país.
Mientras, Cuba vive una escalada de la pandemia, que ha superado los 8.000 casos diarios el fin de semana último y superado el medio centenar de fallecidos por jornada, según cifras oficiales.
Ninguna esperanza para nadie, porque hasta las protestas persiguen, por tanto, nadie se puede quejar... En lugar de tener a tanto policía parásito en las calles y a Díaz Canel haciendo trabajo voluntario en el campo ayer, por qué no remiten a toda esta gente para los hospitales a ayudar al personal sanitario o los ponen a sembrar comida en el campo, criar cerdos para tener carne, o a hacer algo más productivo.
El mundo no ve, ni oye, ni escucha. Sólo 21 países han prestado atención a Cuba.
¡ GUACHIPUPA-NEL Y MUERTE !