Con el propósito de topar los precios y controlar de forma más eficiente a los motoristas que ofrecen servicios de transportación privada en Santiago de Cuba, las autoridades locales despliegan una campaña para que dichos trabajadores soliciten una licencia que les permita desarrollar la actividad de forma legal.
Una de las principales razones por las cuales las autoridades santiagueras insisten en la importancia de dicho proceso es topar los precios del transporte, los cuales calificaron como "abusivos" en un reporte publicado por el diario oficial Juventud Rebelde.
Según una ciudadana entrevistada por el medio oficial, los precios han subido considerablemente en los últimos tiempos, marcados por la escasez de combustible que se agudizó a finales de 2019, lo que Miguel Díaz-Canel calificó como un "período coyuntural".
Tras varios años en que la actividad, realizada sin licencias oficiales, se desarrolló de acuerdo a la oferta y demanda, las autoridades muestran prisa por regularla mediante "tarifas accesibles a los clientes y aceptables para los motoristas", indicó el medio estatal.
Los nuevos precios "se elaboraron sobre la base de una ficha de costo que tiene en cuenta el escenario actual y el comportamiento heterogéneo en los municipios", dijo Jaime Codorniux, director de la Empresa Provincial de Transporte.
"En la cabecera provincial ya se habían definido varios anillos para el servicio de taxis e hicimos un híbrido con eso, con tarifas diferenciadas dentro de la urbe, las zonas periféricas y los poblados. Hoy están en fase de aprobación por el Ministerio de Finanzas y Precios", agregó.
Además de los supuestos incentivos, las autoridades de Santiago de Cuba amenazan a los motoristas con la aplicación de Decretos como el 30 y 31 del presente año, que implican fuertes sanciones, que en caso de reincidencia pueden llegar hasta el decomiso del vehículo.
Según la Empresa Provincial de Transporte de Santiago de Cuba, actualmente hay 9.965 motos registradas en la provincia a nombre de personas naturales, pero de ellas unas 3.000 son Babeta, Riga y Berjobina, marcas a las que no se les permitirá adquirir licencias operativas por "no estar diseñadas para el rigor de la transportación diaria".
La prisa del Gobierno por legalizar la transportación en motocicletas es tal que solo en el mes de febrero 2.290 propietarios han sido visitados por funcionarios para "constatar su disposición a legalizarse", de los cuales unos 1.695 habrían respondido afirmativamente, según la prensa oficial.
La nota publicada en Juventud Rebelde indica que unos 1.970 motoristas han iniciado los trámites de solicitud de la licencia. Actualmente 99 personas cuentan con dicho autorizo, de los 59 que lo tenían al cierre del pasado año.
Para agilizar el proceso, las autoridades de Santiago habilitaron las nueve oficinas municipales de la Unidad Estatal de Tráfico y otros cuatro espacios en la cabecera provincial, que concentra más del 70% del total de motocicletas.
Varios organismos de la provincia como el Banco Central, FINCIMEX, la Planta de Revisión Técnica (FICAT), la Empresa de Seguros, las direcciones de Salud, la ONAT, la Escuela de Conducción Vial, la Empresa de Transporte y la Unidad Estatal de Tráfico, trabajan sincronizadamente para compactar los 11 trámites necesarios y reducir a 30 o 45 días lo que suele durar más de tres meses.
Los motoristas que adquieran la licencia operativa "pagarán ocho pesos diarios de impuestos y tendrán derecho a comprar de 80 a 160 litros de combustible en el mes a precios inferiores a los minoristas: cada litro a 14, 15 o 16 pesos, según la categoría. Además, estarán exentos de la declaración jurada y la liquidación de impuestos por ingresos personales", afirmó Codorniux Furet.
Pobres cubanos que no pueden tener ni una motorcicleta de mierda!
Abusivos e inaceptables son los ptrecios de productos escenciales en MLC .De eso no habla ese MALDITO GOBIERNO.